El saldo oculto de la guerra

En los municipios de Jalisco se han descubierto más de 100 fosas clandestinas desde que arreció la disputa de los grupos delictivos por el control territorial del estado, y donde yacían ocultos 200 cuerpos, tan sólo en lo que respecta a los expedientes que ha llevado la Fiscalía General estatal.

Luis Herrera Luis Herrera Publicado el
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La falta del recurso humano (en el IJCF) ha ocasionado el rezago en la emisión de dictámenes periciales, afectando de manera indirecta la procuración y la impartición de justicia
La Fiscalía señala al CJNG como el principal grupo detrás de las fosas en el estado, aunque no el único, también apunta a La Resistencia, Milenio y La Corona
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En los municipios de Jalisco se han descubierto más de 100 fosas clandestinas desde que arreció la disputa de los grupos delictivos por el control territorial del estado, y donde yacían ocultos 200 cuerpos, tan sólo en lo que respecta a los expedientes que ha llevado la Fiscalía General estatal.

En los años 2007 y 2008, cuando el Cártel de Sinaloa mantenía su presencia hegemónica, las autoridades locales no dieron con ninguna de estas inhumaciones ilegales, así que fue en 2009 cuando comenzaron a extenderse por gran parte del estado y aun en el Área Metropolitana de Guadalajara. 

De 2009 a 2015 la Fiscalía ha conocido de 127 fosas clandestinas, con uno o hasta 17 cuerpos en su interior, localizadas en 39 municipios, esto es, una tercera parte del estado con estos rastros que suelen dejar tras de sí las luchas intestinas de las organizaciones delictivas. 

No es casual que los años con más fosas encontradas coincidan con los puntos más álgidos de la pugna de estos grupos por la supremacía en el estado: 2011, con 31; 2012, con 25; 2013, con 15 y aun 2014, con un repunte a 31 casos. 

El 2014 no es sólo el año en que se hizo clara la consolidación del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) como la organización dominante, es también el que arroja el mayor número de cuerpos hallados en fosas clandestinas desde que se lleva registro, con 44: el saldo de su ascensión.  

De hecho, la Fiscalía señala al CJNG como el principal grupo detrás de las fosas en el estado aunque no el único, también apunta a La Resistencia, Milenio (emparentados estos) y La Corona, adversarios de aquel. 

Apenas en julio pasado, la Administración para el Control de Drogas (DEA), en su “Evaluación Actualizada sobre las Áreas de Control Dominante” de los cárteles en México, concluía que el CJNG es la organización de “más rápido crecimiento” en el país, y que:

“El CJNG usa sus alianzas y explota la debilidad de los cárteles rivales para apoderarse de nuevos territorios, o incrementar su presencia en áreas que ya están bajo su control”. 

La identificación

Ahora bien, de esos 200 cuerpos hallados en fosas, la Fiscalía ha identificado hasta ahora solamente a 121, por lo que hay 79 en los que no se ha determinado de quién se trata, lo que agrava la condición de Jalisco como el cuarto estado del país con más desaparecidos, con 2 mil 29. 

En materia de efectividad en esta identificación, los peores años de las autoridades ministeriales fueron: el 2010, cuando determinó la identidad únicamente del 25 por ciento de estos cadáveres (tres de 12 totales), y el 2014, cuando lo hizo con sólo el 41 por ciento (18 de 44). 

Esta información de la Fiscalía no considera los hechos del municipio de La Barca, de competencia de la Procuraduría General de la República (PGR), donde entre noviembre de 2013 y enero de 2014 se descubrieron 37 fosas con 75 cuerpos, de las que sólo 17 han sido identificados, según reporta. 

Todas las fosas de La Barca están bajo una sola averiguación previa de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), aún en trámite. 

Banco de ADN

El Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), un organismo descentralizado encargado de aportar las pruebas periciales, informó en mayo de 2014 que contaba con 6 mil 236 perfiles genéticos en su banco de datos, básico para la identificación de los cuerpos en fosas. 

Ese banco de datos genéticos comenzó a operar en Jalisco apenas en junio de 2011, justo en medio del mayor pico de violencia. En cambio, la base de datos de genética forense de la Coordinación General de Servicios Periciales de la PGR, tiene ya 25 mil 764 perfiles genéticos. 

De estos, la PGR precisa que 3 mil 500 son perfiles que pertenecen a cadáveres en calidad de desconocidos, mientras que 15 mil 284 fueron recolectados de familiares de personas desaparecidas para su búsqueda; el resto, 6 mil 980 se originaron en el rubro de indicios. 

Este nivel de desglose sobre la composición del banco de datos genéticos de la PGR no lo ofrece el IJCF, que no precisa, por ejemplo, cuántos de sus perfiles han sido tomados de familiares de personas desaparecidas en el estado. 

Incluso, la organización Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco (Fundej), solicitó desde el 18 de marzo: “Que el IJCF llame a todas las familias denunciantes para proceder a tomar muestras de ADN y que entregue a las familias los resultados”. 

Así como que “de inmediato se cree una Unidad de Búsqueda Rápida ya sea para casos recientes como para casos antiguos. Búsqueda en sitio, revisión de cámaras, solicitud de sábanas a compañías de telefonía celular, interrogación de testigos hasta búsqueda en fosas”. 

Estas con otras seis demandas siguen sin ser atendidas plenamente por el Estado, según lo denunció Fundej el 30 de agosto pasado.   

La PGR aseguró en junio de 2014 que con los perfiles que ha tomado de cadáveres en calidad de desconocidos “se han identificado a través de la información contenida en la base de datos de genética forense a 200 de ellos” en el país: 30 mujeres, el resto hombres.

Saturación para dictámenes

A los múltiples problemas de la procuración de justicia en Jalisco se suma la saturación de su IJCF, como responsable de elaborar los dictámenes periciales para las investigaciones de la Fiscalía.  

Desde el inicio de la gestión del gobernador, Aristóteles Sandoval Díaz, en marzo de 2013, su gobierno advirtió en el Programa Sectorial en Seguridad Ciudadana: 

“Actualmente ha quedado de manifiesto el rezago en la emisión de dictámenes periciales, pues a lo largo de varios años la plantilla del IJCF no ha sido reforzada de acuerdo a su demanda”. 

En ese programa se estima que el IJCF requiere, al menos, de 205 peritos más, así como reforzar el equipamiento forense y su infraestructura, incluyendo nuevos laboratorios en distintas materias, la genética entre estas. 

En el 2012, por ejemplo, “el IJCF recibió la solicitud para realizar 146 mil 476 dictámenes pero sólo logró atender 141 mil 30. El rezago aumenta cuando vemos que en 2013 se solicitaron 158 mil 953 y sólo 149 mil 63 fueron atendidos”. 

Así que concluye: “La falta del recurso humano ha ocasionado el rezago en la emisión de dictámenes periciales, afectando de manera indirecta la procuración y la impartición de justicia”. 

El IJCF tiene 280 peritos en 27 especialidades forenses, y está presente en nueve de las 12 regiones con sus delegaciones:

“Sin embargo, las delegaciones se encuentran en una situación difícil debido a la falta de personal, infraestructura y equipamiento (…) las instalaciones de las sedes de algunas son prestadas o rentadas y no responden a las necesidades que demandará el nuevo sistema”. 

Resolver esta saturación es importante, señala, ante el nuevo sistema de justicia penal que debe estar en total operación el 17 de junio de 2016, y que apuesta por investigaciones científicas, no más dependientes de la confesión del implicado, ni de su detención en flagrancia.

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