El Gobierno federal se enfrenta a un dilema sin precedentes. El país está sumergido en una doble crisis: económica y sanitaria, y a esto se suma que dispondrá de una bolsa más pequeña de recursos en el Presupuesto para gastar durante el próximo año.
Especialistas y legisladores coinciden en que las prioridades del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) para el ejercicio fiscal 2021 deben estar centradas en el fortalecimiento del sistema de salud y educativo, así como en el desarrollo de la infraestructura pública. La finalidad: impulsar la reactivación económica.
Sin embargo, preocupa que en el Paquete Económico 2021 se prioricen, una vez más, los programas insignia de la actual administración, como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el nuevo Aeropuerto Internacional de Santa Lucía
Y no solo eso, también se teme que ocurra algo similar a lo del PEF 2020 con el que se privilegió a Petróleos Mexicanos (Pemex), bajo el argumento de rescatar la soberanía energética.
Un punto relevante dentro de la ejecución del PEF 2021, es que ocurrirá en un momento clave para la vida política de México, ya que el domingo 6 de junio del 2021 se realizarán las elecciones intermedias más grandes en la historia del país y en las que se votará por 3 mil 528 representantes populares.
Se renovará por completo la Cámara de Diputados y se elegirán 15 gubernaturas, además de 30 Congresos locales y ayuntamientos.
La tarea para el equipo liderado por Arturo Herrera, secretario de Hacienda, no es sencilla, pues está obligado a ser realista y cuidadoso con el gasto público, sobre todo porque se anticipa que sea un Paquete Económico más austero que el aprobado para este año.
A pesar de que especialistas insisten en la necesidad de impulsar una reforma fiscal, el titular de la SHCP aseguró hace días que no se optará por esta vía y se mantendrá la promesa de no incrementar ni crear nuevos impuestos. El subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, informó que solo se realizarán ajustes inflacionarios.
La duda que más inquieta a los analistas es saber de dónde obtendrá recursos el gobierno, pues la pandemia provocó una caída en los ingresos tributarios, y los “guardaditos” del país, como el Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios (FEIP) y el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF) se acabaron. A esto se suma que el presidente Andrés Manuel López Obrador rechaza la idea de contraer deuda para apuntalar la economía.
Enrique Díaz-Infante, director del Programa del Sector Financiero y Seguridad Social en el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), opina que el PEF 2021 será uno de los más difíciles en la historia del país y adelanta que la actual administración tiene mucho en juego.
Va a ser un paquete económico muy desafiante y si el gobierno quiere salir de la actual crisis está obligado a destinar más gasto en salud, educación e infraestructura
“Sin embargo, las expectativas no son buenas porque no quieren incurrir en más deuda y al mismo tiempo buscan mantener una férrea disciplina fiscal y esto llevará a que haya más recortes, aun cuando ya no hay tela de donde cortar”.
Reparar las fallas en el Presupuesto
Para este año se aprobó un gasto por el orden de los 6.1 billones de pesos, sin embargo, el propio presidente López Obrador aseguró que la caja para el próximo año vendrá “ajustada” y con disminuciones considerables en el gasto corriente del gobierno.
Tras la presentación este día del PEF 2021, la Cámara de Diputados tendrá que aprobar la Ley de Ingresos a más tardar el 20 de octubre y los senadores tendrán que hacer lo propio antes del 31 de octubre, de acuerdo con la Fracción IV del Artículo 42 de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria. Por su parte, el Presupuesto de Egresos deberá ser aprobado por los diputados máximo el 15 de noviembre.
Para el área educativa es fundamental incrementar los recursos, ya que un gran porcentaje de lo asignado cada año se destina a gasto corriente. No obstante, la emergencia sanitaria obligó a la SEP a crear contenidos educativos que se transmiten a través de la radio y la televisión.
Dado que las actividades presenciales se retomarán conforme cambie el semáforo en las entidades, la dependencia a cargo de Esteban Moctezuma necesitará de más recursos para atender a los 26 millones de estudiantes de nivel básico.
La urgencia de destinar más recursos al ramo de salud se hizo evidente con la actual pandemia, ya que las fallas del sistema provocaron una saturación de los servicios públicos.
A la fecha, México destina alrededor del 5.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en el ámbito de salud, cifra que ubica al país como uno de los que menos invierte en este rubro, de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Uno de los retos para el gobierno será obtener recursos, pues los ingresos tributarios del país cayeron por la pandemia y el FEIP y el FEIEF se agotaron
El coordinador de Movimiento Ciudadano en la Cámara de Diputados, Tonatiuh Bravo Padilla, manifiesta que en la propuesta del Paquete Económico 2021 se debe hacer un análisis con el objetivo de priorizar el crecimiento económico y la salud.
“Hace falta apoyar a las entidades federativas y a los hospitales de todo el sistema para salvar el mayor número de vidas posibles, no solamente por la actual emergencia sanitaria. Y en la parte económica se debe estimular la recuperación del empleo, la producción, y, por supuesto, la demanda”.
