El ‘New Deal’ de Peña Nieto
Muy al estilo del New Deal de Franklin D. Roosevelt para atajar a los monopolios en Estados Unidos en beneficio de la sociedad, el presidente Enrique Peña Nieto presentó la iniciativa de reforma de las telecomunicaciones, para acotar el poderío de los dueños de las televisoras, telefónicas y radiodifusoras.
Una iniciativa con “muchos dientes” que busca abrir la competencia en el sector, democratizar los servicios para toda la población, profesionalizar los tribunales, y unificar a los reguladores en un solo organismo autónomo, además de también consolidar el poder del Estado.
Georgina Howard
Muy al estilo del New Deal de Franklin D. Roosevelt para atajar a los monopolios en Estados Unidos en beneficio de la sociedad, el presidente Enrique Peña Nieto presentó la iniciativa de reforma de las telecomunicaciones, para acotar el poderío de los dueños de las televisoras, telefónicas y radiodifusoras.
Una iniciativa con “muchos dientes” que busca abrir la competencia en el sector, democratizar los servicios para toda la población, profesionalizar los tribunales, y unificar a los reguladores en un solo organismo autónomo, además de también consolidar el poder del Estado.
Se propone modificar ocho artículos de la Constitución y más de 12 leyes secundarias para:
> Licitar dos nuevas cadenas nacionales de televisión abierta, obligar a las televisoras a regresar al Estado los canales que resulten de la transición digital.
> Replantear nuevas fórmulas tarifarias en telefonía fija y móvil, crear el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y dar más “dientes” a la Comisión Federal de Competencia (Cofeco).
> Abrir el 100 por ciento a la inversión extranjera directa en telecomunicaciones, y del cero al 49 por ciento, en radio.
> Confirmar que se garantizará a la población el acceso a la banda ancha mediante una política de inclusión digital universal con metas anuales y sexenales.
> Operar con la infraestructura, es decir, la fibra óptica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que cederá su concesión a Telecomunicaciones de México para instalar, operar y explotar una red pública.
Además, el gobierno instalará una red compartida de servicios de telecomunicación al mayoreo, que impulse el acceso efectivo de la población.
Para cumplir el Programa de Licitación y Adjudicación de frecuencias de Televisión Radiodifundida Digital, se publicará en un plazo no mayor a 90 días naturales las bases y convocatorias para la licitación de dos nuevas cadenas de televisión con cobertura nacional.
La iniciativa prohíbe participar en las licitaciones a los concesionarios o grupos con vínculos comerciales, organizativos, económicos y jurídicos que ya tengan concesiones por 12 MHz o más.
IFT: Ente autónomo
El nuevo IFT transformará la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel). Será un ente autónomo y con el permiso constitucional para licitar, negociar y quitar concesiones.
Estará compuesto por siete comisionados, incluyendo a su presidente, designados en forma escalonada a propuesta del Ejecutivo, pero con la ratificación del Senado.
Los candidatos deberán ser mexicanos, mayores de 35 años, sin antecedentes penales, con cinco años de experiencia en la material y no podrán haber sido secretarios de Estado, senadores o diputados, durante el quinquenio anterior a su nombramiento.
Además, no podrán haber ocupado empleos o cargos en las empresas de los concesionarios, sujetas a la regulación.
“Se considerará como agente preponderante a cualquiera que cuente directa o indirectamente con una participación nacional de 50 por ciento, medido este porcentaje por el número de usuarios, por el tráfico de sus redes, o la capacidad utilizada de las mismas”, dice el documento.
Una vez identificadas las empresas que rebasen dicho porcentaje, el nuevo órgano regulador establecerá las medidas que permitirán la “desagregación efectiva de todas las redes locales de telefonía, televisión restringida e Internet fijo”.
Con ello se busca que los nuevos participantes puedan acceder a los medios físicos y técnicos de conexión entre cualquier punto terminal de las redes públicas de telecomunicaciones y las centrales locales.
Una vez resuelta la existencia de “agentes económicos preponderantes”, el IFT podrá imponer medidas para que no se afecte la libre competencia y a los usuarios finales de telefonía fija y móvil.
‘Must carry, must offer’
Sobre la relación comercial entre televisoras abiertas y restringidas (must carry y must offer), se propone “la gratuidad” de las retransmisiones.
Pero esta dejará de tener efecto si la empresa de cable tiene la capacidad financiera para pagar a la de televisión abierta un porcentaje por dicha retransmisión.
En las últimas semanas los representantes de los concesionarios presionaron a los integrantes del Pacto por México que tuvieron que incluir una cláusula para que solo las empresas con poder sustancial en telecomunicaciones y radiodifusión tengan que pagar una contraprestación económica.
Así, solo las empresas “pequeñas” o “con limitantes económicas y técnicas” podrán transmitir de manera gratuita contenidos de canales abiertos.
La reforma pone también candados a “subsidios cruzados” y a la “multiprogramación”, para que los concesionarios no beneficien a otras filiales o subsidiarias del mismo grupo de interés económico.
Extiende su rectoría
La mano ejecutora del Estado tendrá, más allá de este ámbito, atribuciones para perseguir y castigar acaparamiento que evite la libre competencia en perjuicio del público.
Tendrá la facultad de establecer reservas nacionales o suprimirlas, en petróleo, carburos de hidrógenos sólidos, líquidos, gaseosos o de minerales radioactivos.
Incluso, deja claro que no se otorgan concesiones en la distribución y abastecimiento de energía eléctrica.
Contenidos pagados
En cuanto a la libertad de expresión, garantiza que la manifestación de las ideas no será objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa.
Pero advierte que, en caso de ataque a la moral, vida privada o derechos de terceros que provoquen algún delito, o perturben el orden público, se ejercerá la ley.
Prohíbe la transmisión de publicidad o propaganda presentada como información periodística o noticiosa.
Y establece las condiciones que deben regir los contenidos y la contratación de los servicios para su transmisión al público.
“En ningún caso podrán secuestrarse los bienes utilizados para la difusión de información, opiniones e ideas, como instrumento del delito”.
Los puntos
> Sancionar las prácticas monopolísticas.
> Creación de un Instituto Federal de Telecomunicaciones encargado de otorgar o revocar la autorización de concesiones en el sector (comercial, público y privado).
> Fortalecer la Comisión Federal de Competencia.
> Apoyo a radios comunitarias y la creación de un instituto que las defienda.
> Licitación de dos nuevas cadenas de televisión.
> División de los activos, derechos y partes de las empresas que concentran más del 50 por ciento de las prestaciones de servicio de telecomunicación y radiodifusión.
> Gratuidad en la retransmisión de señales de televisión abierta en servicios que ofrezcan televisión de paga.
> Banda ancha para todos.
> Prohibición de transmitir publicidad o propaganda.
> Apertura del 100 por ciento a la inversión extranjera directa en telecomunicaciones y del 49 por ciento en radiodifusión.
> En las licitaciones no podrán participar empresas que tengan concesiones por 12MHz o más.
Un día histórico
El presidente de la Cofetel, Mony de Swaan, escribió en Twitter: «Día histórico. La iniciativa en telecom aterriza compromisos del #PactoporMexico, por el bien del país y la fortaleza de sus instituciones».
José Luis Peralta, comisionado de ese órgano regulador, propuso que se incluya en un artículo transitorio para asegurar que las investigaciones que lleva a cabo la comisión, continúen en el nuevo instituto.
«Espero que los actuales comisionados puedan unirse al nuevo instituto», dijo al reconocer que “hay incertidumbre” sobre el papel que puedan jugar los actuales comisionados de la Cofetel en la nueva organización.
Irene Levy, presidenta de Observatel, consideró Teléfonos de México tendrá que decidir cómo venderá su participación en el mercado, pues concentra el 90 por ciento en telefonía fija y el 70 por ciento en móvil.
La diputada perredista, Purificación Carpinteyro, señaló que, en el caso de los operadores predominantes de televisión por cable, que tengan más de cinco millones de usuarios, sí se les cobraría el costo de la retransmisión, pero sin la posibilidad de transferir ese costo a los usuarios.
Respecto al tema de la digitalización, que multiplicará los canales al pasar de analógicos a digitales, Carpinteyro explicó que la iniciativa establece que el nuevo instituto de telecomunicaciones determinará los criterios para acceder a la multiprogramación, incluyendo el pago de contribuciones debidas.
Se tratará de criterios “ajustables”, para que ningún operador concentre más del 50 por ciento del sector, como la misma reforma establece, lo que implicaría que posiblemente las televisoras no podrían, dijo.
El abogado especialista en derecho a la información, David Peña, opina que de aprobarse la nueva relación entre concesionarios, habría una “inequidad económica”, que al final, el perjudicado sería el televidente.
“No se puede fijar un criterio de apertura de mercado, a partir de quién tiene más o quién tiene menos poder adquisitivo”.
En su opinión, esta argumentación generará arbitrariedades y el agente predominante siempre saldrá beneficiado, sin importar la premisa que la gratuidad les dará más televidentes, porque se verán más sus contenidos y, en consecuencia, sus anuncios.
Televisa y MVS de acuerdo
Grupo Televisa aplaudió la iniciativa del presidente Enrique Peña Nieto y se dijo lista para competir en lo que considera una nueva etapa en el sector, en México.
“Grupo Televisa ha realizado inversiones importantes y se ha preparado para competir ahora en un campo más parejo, con nuevas reglas del juego, como las que contempla la reforma, que toma en consideración las asimetrías existentes en el sector”.
En un comunicado oficial reconoció que la competencia es el mejor motor de desarrollo y crecimiento económico.
Además, la iniciativa ayudará a modernizar las telecomunicaciones y propiciar la inversión.
“Grupo Televisa continuará invirtiendo en la producción de los mejores contenidos (…) Continuará participando activamente en desarrollar y ofrecer servicios de televisión restringida, acceso a internet de banda ancha y telefonía, tanto fija como móvil, a menores precios y mejor calidad”, abundó.
Por su parte, el presidente de MVS, Joaquín Vargas, aplaudió la “inédita y valiente” iniciativa que sin duda será para beneficio de México.
Posibilita y fomenta una mayor competencia, con lo que se generan condiciones de equidad en beneficio de los mexicanos.
Caen acciones de Televisa y América Móvil
Por Alberto Morales
El título de la empresa presidida por Carlos Slim cae a su nivel más bajo desde julio del 2009
Los mercados no tuvieron que esperar mucho para reaccionar después de la presentación de la iniciativa de reforma en telecomunicaciones hecha ayer por el presidente Enrique Peña Nieto.
En general, la Bolsa Mexicana de Valores terminó con pérdidas del 0.70 por ciento el día de ayer. Esto se debe principalmente por la caída de América Móvil y de Televisa.
El Índice de Precios y Cotizaciones cayó en 309.21 puntos, debido a la fuerte ponderación que tienen las dos empresas más importantes de telecomunicación.
La acción de América Móvil retrocedió en 3.31 por ciento en la sesión de ayer, lo cual la lleva al nivel más bajo desde julio del 2009. Esto debido a que se abrió la posibilidad a mayor competencia.
Por su parte, Televisa tuvo una menor caída de 0.95 por ciento, donde el precio de la acción bajó a 67.65 pesos.
A pesar de que Emilio Azcárraga le dio bienvenida a la competencia después de la presentación de la reforma, los mercados no parecen estar en la misma línea.
Todavía tiene que aprobarse en el Congreso la reforma, por lo que no hay nada definitivo. Sin embargo las posibilidades son importantes, ya que tanto la bancada del PRI se ha mostrado positiva, como el líder del PRD, principal oposición.