El luto por Bantú

Hijo de Dinga, un gorila violento capturado en África, y de Mahari, una hembra donada por el zoológico de Cincinnati, Bantú era el último macho de su especie en la Ciudad de México y no podrá ser repuesto debido a la prohibición del artículo 55 bis de la Ley General de Vida Silvestre.

Los reclamos tras su muerte plantean de nuevo la renuncia de Tania Müller, secretaria del Medio Ambiente, e incluso el cierre del Zoológico Chapultepec o la transformación de este espacio en un santuario.

Además, organizaciones civiles y defensores de animales se cuestionan cuánto se ha cobrado por las pólizas de estas especies aseguradas que han muerto, y qué se hace con el dinero que ingresa a las arcas del gobierno capitalino.

Quien pone el dedo en la llaga es Marielena Hoyo, exdirectora del Zoológico Chapultepec, quien reclama la escasa transparencia en el tema.

“Quiero suponer que a Tania Müller le mienten, pues primero le dijeron que procedieron a la necropsia inmediata porque el director del Zoológico de Chapultepec le dijo que estaban de vacaciones, y segundo, para justificar que lo hicieron pedazos, le argumentan que por su tamaño no cabía en el horno”, suelta Mariaelena Hoyo, exdirectora del Zoológico y responsable de bautizar a Bantú con ese nombre, en referencia a la región de África en la que fue capturado su padre.

“En caso de que no quepa, lo entierras, como lo hicieron con la elefanta, pero no lo despedazas. Bantú era historia pura, hijo de un gorila con un historial de macho violento que había matado a dos hembras y que había sido determinado como estéril hasta que conoció a Mahari, aquí en Chapultepec”.

“Era un animal que heredó la seguridad del padre y la sociabilidad de la madre, y que no hay manera de reponer mas que ingresando al país el semen de otro macho”, precisa.

Tras la muerte del gorila, que ventila claroscuros del sistema de zoológicos, la también activista de las causas de animales explicó que presentará una denuncia penal por los hechos, una vez que se obtengan los resultados oficiales de las muestras que analiza la UNAM y del Servicio Nacional de Sanidad Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, .

La exfuncionaria del GDF pone el dedo en la llaga respecto a la mala preparación del operativo para el traslado de Bantú, que sería llevado al zoológico de Guadalajara para su reproducción.

La Profepa señaló que se investigan las irregularidades encontradas en la administración de los anestésicos.

“Un par de anestésicos fue la combinación perfecta, la tiletamina con el zelacepam, sin embargo, la medetomidina no es recomendada para simios adultos”, detalla por su parte Marielena Hoyos.

Profepa calcula que en un mes contará con los resultados de los laboratorios de patología y se determinará si el Zoológico de Chapultepec actuó con negligencia.

Proponen cierre de Chapultepec

Ayer mismo, el Proyecto Gran Simio México dio a conocer los resultados de la encuesta que aplicó el sábado 9 y domingo 10 de julio, en la que el 76 por ciento de los casi 700 consultados opinó que los zoológicos deben transformarse en santuarios.

Este miércoles los defensores de los animales de Proyecto Gran Simio México efectuarán una manifestación en las inmediaciones de la Asamblea Legislativa de la capital.

Paulina Bermúdez, directora de Gran Simio México, lanzó desde ayer lunes la consulta en línea en la plataforma Change.org a fin de que los ciudadanos opinen qué hacer para evitar que más animales mueran en cautiverio.

De los 694 que participaron, 131 opinaron que el zoológico de Chapultepec debe cerrarse; 21 personas, que debe mantenerse como está.

“La gente no está contenta con lo que está sucediendo con los animales y se requiere un cambio de fondo, principalmente en la administración”, puntualizó Paulina Bermúdez.

“Los niños señalaron que realmente no aprenden nada en los zoológicos, lo que significa que no se cumple con el objetivo educativo. Nuestra postura va en contra del cautiverio de los animales, especialmente en aquellos casos en los que no hay un objetivo real de conservación, como es el caso de los grandes simios en Chapultepec”.

Además de Bantú,durante esta administración han muerto el orangután Jambí y el chimpacé Lio.

La Ley General de Vida Silvestre prohíbe la introducción al país de ejemplares primates.
 
Integrantes de Proyecto Gran Simio México acudirán mañana a la Asamblea Legislativa del DF para pedir la destitución de Tania Múller como secretaria del Medio Ambiente capitalina.

Preparan denuncias

En medio de la polémica, el miércoles a las 11:30 horas el Frente Ciudadano Pro Derecho Animal, que dirige José Luis Carranza, presentará la denuncia contra quien resulte responsable por el delito de maltrato animal culposo.

“Queremos que se investigue si hubo negligencia y en todo caso se procese por el delito de maltrato animal culposo, queremos que la Procuraduría cite a todos aquellos que estuvieron involucrados en el operativo a fin de deslindar responsabilidades”, apunta Carranza.

Desde el viernes, el Gobierno de la Ciudad de México suspendió temporalmente de su cargo al director general de zoológicos y vida silvestre, el veterinario Juan Arturo Rivera Rebolledo, con el propósito de que existe absoluta transparencia en la investigación de las causas del fallecimiento del gorila Bantú.

‘Estamos dañados’

“Una necropsia no es algo fácil de digerir para muchas personas, es algo complicado para quienes no están acostumbrados a trabajar con cadáveres, sin embargo, es un procedimiento que se hace con todos los ejemplares que causan baja”, explica Fernando Cortés.

El director general de zoológicos de la Ciudad de México trata de explicar el porqué de las imágenes del cuerpo destazado de Bantú.

Dicha área, dependiente de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), está en crisis tras la muerte del único simio macho de su especie en el país.

“Lo que te puedo decir como médico, cuando se trabaja con un animal vivo pueden pasar muchas cosas. Un sinfín de situaciones que se pueden complicar en el manejo de un animal, nos encontramos dañados por esta situación”.

El funcionario defiende que las dosis de anestesia se aplicaron conforme a los protocolos, y sostiene que la medetomidina se utiliza de manera común.

“Sí está recomendada, puede usted buscarla, es de los alfa dos adrenérgicos y se utiliza de manera común”, puntualiza.

Después de la muerte Bantú, activistas y organizaciones civiles han planteado diversas hipótesis que sugieren negligencia en el manejo de esta especie.

Incluso, han puesto sobre la mesa las pólizas que cubren mediante aseguradora la integridad de los animales.

“Todos los animales de la dirección están asegurados, todo el que nace y los que están de manera física; nosotros tenemos la póliza de cada uno de los ejemplares”.

Cada tres meses, la Dirección General de Zoológicos está obligada a entregar un informe a la empresa aseguradora a través del cual se reporta cuántos animales causaron baja.

“Cuando causa baja, se tarda un año aproximadamente en que caigan los recursos a la Sedema”, explica sin poder precisar cuántos animales han muerto este año o en la administración actual.

El especialista refiere que aún no se definían con precisión los tiempos del convenio a partir del cual Bantú, que era el único macho de su especie en el país, se quedaría en el zoológico de Guadalajara para reproducirse con las dos hembras que habitan allá