El gran elector
La influencia del exrector Raúl Padilla López en la Universidad de Guadalajara ha sido evidente en el actual proceso de elección del nuevo encargado del centro educativo, ya que algunos aspirantes han destacado y justificado el papel que ha desempeñado
Jonathan ÁvilaLos análisis sobre la designación de un nuevo rector en la Universidad de Guadalajara apuntan a que ésta ya es una elección calculada. Las expresiones en el marco del proceso han servido para medir el poder de despliegue que sigue teniendo el exrector Raúl Padilla López cuando la prensa cuestiona a los aspirante sobre el papel que ostenta al interior de la institución.
El pasado 24 de enero concluyó el proceso de registro de los aspirantes a la Rectoría general de dicha universidad y quienes quieren llegar al máximo cargo administrativo entraron en un proceso de campaña donde platican con medios sobre el perfil que representan y su aporte a la casa de estudios, para que esto se tome en cuenta en el Consejo General Universitario que votará al rector el próximo miércoles 6 de febrero.
A pregunta expresa de la prensa local, los aspirantes han tenido que dar su punto de vista sobre el papel de Padilla López en la casa de estudios.
Uno de los primeros fue José Alberto Castellanos Gutiérrez, quien justificó su cercanía con el presidente de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara bajo el argumento de que así como recurre a él para un consejo, también lo hace con otros personajes influyentes como Trinidad Padilla, hermano de Raúl; Tonatiuh Bravo o Alfredo Peña Ramos.
Sin embargo justo estas cuatro figuras representan lo que en la jerga crítica de la universidad se conoce como el “Sanedrín”, que sería el grupo compacto que toma las decisiones universitarias.
Ricardo Villanueva, otro de los aspirantes con mayores probabilidades de ser electo, inició su declaración señalando que desconocía la existencia de esta agrupación, criticándola como un ’reduccionismo’ pero reconociendo el liderazgo de Padilla.
“Bajo esta lógica de que las decisiones se toman entre pocos es reduccionista. Eso no niega que, como en cualquier institución o comunidad, hay liderazgos y eso también es bueno. Ninguna institución se puede mover sin liderazgo”, respondió Villanueva Lomelí.
Héctor Raúl Solís Gadea, aspirante desde la rectoría del centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, respondió a los cuestionamientos sobre Raúl Padilla con referencia a los que cambios que impulsó durante su administración y que eso ha tenido un impacto en los universitarios.
“Es cierto que el licenciado Padilla es un hombre que ha sido muy importante (…). Naturalmente el exrector ha sido muy activo en la universidad, impulsa proyectos muy importantes, es un líder entre los universitarios, como hay otras personas que también son muy importantes, y su opinión indiscutiblemente cuenta”, declaró Solís Gadea.
En tanto que Héctor Raúl Pérez Gómez, también aspirante, al ser cuestionado sobre su cercanía a Padilla López y la posibilidad de que eso le favorezca, declaró que no se puede regatear el legado de éste.
“No podemos los universitarios menos que considerar a Raúl Padilla López como un referente impulsor de la educación superior en el estado de Jalisco y en el país, y no podemos tampoco regatearle ni un milímetro de su aportación a la cultura”, explicó Pérez Gómez.
Además, el director de los Hospitales Civiles de Guadalajara dijo que no solo se debe tomar importancia a los aportes e intereses del exrector universitario en las actividades de la UdeG, sino que se también habría que ‘aclarar’ que Padilla López respeta los procesos.
“El licenciado Padilla es muy respetuoso de los preceptos normativos y legales de la institución, de tal manera que pedirle un consejo, una opinión, escuchar una reflexión de su parte es siempre enriquecedor. Pero cuando digo que es respetuoso de la vida institucional me refiero a que en todos los momentos, incluido el que actualmente nos convoca”, agregó Héctor Raúl Pérez Gómez.
“En la comunidad universitaria, y afortunadamente cada vez más fuera de ella, se sabe que los 186 consejeros universitarios tienen la atribución formal de elegir al nuevo rector, pero son Raúl Padilla y un séquito reducido de aliados políticos (por los que nadie votó) los que tiene la atribución real de nombrar al nuevo rector general de la UdeG”, escribió Jaén recientemente en su columna.