Hollywood sigue la ley de los casinos, la casa siempre gana, y los estudios ven por sus ganancias, antes que por quienes hacen las películas por ellos, primero vimos en diciembre como Christopher Nolan despotricó contra HBO Max, streaming perteneciente a Warner Bros, cuando esta compañía anunció que los estrenos serían simultáneos en la plataforma y cines en Estados Unidos a partir del 2021.
Ahora un caso similar al de Nolan se presenta con Scarlett Johansson, que decidió irse por la vía legal y demandar a Disney por estrenar Black Widow en su app y en cines al mismo tiempo, porque esto estaba fuera de las estipulaciones de su contrato, y ella al ser productora ejecutiva, estaba perdiendo millones del boletaje que no se ingresa en salas.
“Los actores y directores, como ella y Nolan, tienen que hacerse a la idea de que el cine ya cambió en su distribución, y que va a ser constantemente híbrido, claro que el problema de ellos es que no sabían y fueron las ratas de laboratorio a las que utilizaron las grandes productoras y distribuidoras para hacer su agosto, sin pedirles permiso y eso es lo que está mal”, argumenta Mallet.
La apuesta de si estrenar o no en plataformas, al mismo tiempo que en salas, se desconoce al día de hoy si será negocio, afirma Stivi de Tivi, porque los comportamientos en el público siguen siendo erráticos e inestables, varios filmes de gran presupuesto no han logrado recuperar su inversión o apenas alcanzan los números negros a flote.
“Hollywood no tiene ni idea, si es rentable o no estrenar películas blockbusters en plataformas, al mismo tiempo que en salas, según esto Jungle Cruise y Black Widow, en sus primeros fines de semana que estrenaron, registraron en Disney+ en Premier Access, como 30 millones de dólares cada una, es una buena cantidad, pero a la semana siguiente su taquilla desplomaba porque la gente ya la tiene ahí, entonces no fue tan rentable”, subraya Solorzano.
El show tiene que continuar, y el séptimo arte camina a marchas forzadas, con todo y protocolos sanitarios, ejemplo de ello es el cineasta Steven Soderbergh que entregó No sudden move a HBO Max en julio pasado y se rodó en pandemia, también Darren Aronofsky se encuentra en la post producción de su nuevo largometraje The Whale, que se produjo en 2021 y además el icónico Martin Scorsese también está filmando ahora su próximo proyecto Killers of the Flower Moon, junto a Leonardo DiCaprio y Robert De Niro.
Mientras que estudios como Sony, retrasan sus grandes producciones como Ghostbusters: Afterlife, Metro-Goldwyn-Mayer hizo lo mismo con la vigesimoquinta entrega de James Bond, No time to die, y Paramount Pictures planea estrenar Top Gun: Maverick en noviembre próximo.
Entonces ¿prevalecerán los blockbusters o el cine alternativo e independiente será el nuevo nicho a futuro? Chavarría observa que las producciones de presupuestos de arriba de 100 millones de dólares, pensarán dos veces en salir a salas y tener una mejor estrategia de mercado para lograr ganancias en taquilla
“Los blockbusters van a salir pero a cuentagotas, como han estado saliendo, porque a estas alturas, en pleno verano, tendríamos que estar con uno o dos blockbusters por semana, y no está siendo así, están saliendo algunos a querer reactivar el asunto y darle continuidad, pero no funciona”, agrega el crítico de cine.
