Carlos Illades, profesor titular del Departamento de Humanidades de la Universidad Autónoma Metropolitana, afirma en entrevista para Reporte Indigo que actualmente existe un divorcio entre los intelectuales y la política.
El autor de libros como ‘El marxismo en México. Una historia intelectual’, sostiene que en la actualidad hay una intelectualidad de izquierda menguada y desconectada de la política. Y explica que esto se debe a que después del ascenso de un sistema neoliberal en el siglo XX, los académicos abandonaron el papel del intelectual público.
“Estuvieron muy asociados con el socialismo y el comunismo, entonces al ser derrotada esa propuesta se retrajeron, muchos abandonaron el campo… Algunos que eran socialistas, comunistas o marxistas y después se volvieron neoliberales o liberales”, declara el profesor.
El académico agrega que el intelectual de izquierda ya no está tan presente en las discusiones públicas porque quienes aparecían en los medios de comunicación impresos no lo hacen en las plataformas electrónicas.
Opina que los intelectuales que aparecen en la esfera pública y en los medios electrónicos pertenecen al statu quo, es decir, son aquellos que replican el pensamiento predominante o hegemónico.
“El campo de los medios electrónicos se cerró y el sistema neoliberal quedó dominando el mundo de la opinión y de los medios. Tú ves las plataformas digitales y aparece cada cinco minutos alguien de izquierda para mostrar que están todas las perspectivas, pero en realidad la inmensa mayoría de los que opinan son las distintas variantes de la postura neoliberal”, comenta.
No obstante, el académico menciona que hay intelectuales de izquierda de la vieja guardia que ya están un poco alejados de la esfera pública, pero que aún escriben y hablan de política, tales como Enrique Semo o Gerardo Esquivel.
Por otra parte, el escritor concluye que el grueso de intelectuales son opinadores o comentaristas que no profundizan en los problemas políticos del país.
También puedes leer:
El voto de los intelectuales por Gibrán Zafra y Eduardo Buendía
La muñeca de la discordia por Hidalgo Neira
