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El costo de la clientela ilustrada

Las becas académicas que ha financiado la Universidad de Guadalajara (UdeG) y donde figuran miembros del gabinete del Gobierno de Jalisco y hasta familiares de la cúpula política que controla a la casa de estudios, han dejado un hueco multimillonario en su presupuesto.

Al ser becas-crédito, la reglamentación obliga a la UdeG a recuperar los montos entregados a becarios que no regresan a trabajar para la institución, sin embargo, esta ha dejado de recobrar una bolsa que ya asciende a 31 millones 547 mil 925 pesos. 

El reglamento de becas de la UdeG restringe las actividades que un becario puede realizar mientras recibe el apoyo de la institución

Las becas académicas que ha financiado la Universidad de Guadalajara (UdeG) y donde figuran miembros del gabinete del Gobierno de Jalisco y hasta familiares de la cúpula política que controla a la casa de estudios, han dejado un hueco multimillonario en su presupuesto.

Al ser becas-crédito, la reglamentación obliga a la UdeG a recuperar los montos entregados a becarios que no regresan a trabajar para la institución, sin embargo, esta ha dejado de recobrar una bolsa que ya asciende a 31 millones 547 mil 925 pesos. 

Como publicó Reporte Indigo, entre los beneficiados de la tolerancia de la UdeG hacia estos adeudos e incumplimientos hay políticos encumbrados, como Netzahualcóyotl Ornelas Plascencia, jefe de gabinete del gobernador Aristóteles Sandoval Díaz, quien debe un millón 631 mil 65 pesos que debió retornar en 2015. 

Según los registros que proporcionó la UdeG, los adeudos vigentes más antiguos son del 2010, con 551 mil 341 pesos de siete becarios, como el secretario particular del gobernador, Giovanni Joaquín Rivera Pérez, con 390 mil 622 pesos: 71 por ciento de todo lo que se arrastra de 2010.  

En 2011 la UdeG debió recuperar 2 millones 721 mil 517 pesos que erogó en 22 becarios, pero no lo hizo, resalta aquí Carlos Briseño Becerra, con 801 mil 175 pesos, exdiputado local y regidor tapatío por el PRI cuando Sandoval Díaz fue alcalde (2010-2012). 

En 2012 la UdeG tampoco reintegró 3 millones 304 mil 968 pesos que dio a 22 becarios, como Jorge Alatorre Flores, exconsejero del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana y su actual director de Participación Ciudadana, con 182 mil 636 pesos. 

En 2013 el déficit creció con 8 millones 70 mil 745 pesos sin restituir de 29 becarios, en este grupo está la diputada federal por Jalisco de Movimiento Ciudadano Mirza Flores Gómez, que aun con su sueldo de diputada adeuda 497 mil 771 pesos. 

En 2014 el monto en becas sin recobrar por la UdeG sumó 7 millones 446 mil 432 pesos por 17 becarios, como Alfonso Partida Caballero, consejero de la Judicatura con 441 mil 70 pesos; y Lorenzo Ruiz López, director de Finanzas del Sistema Intermunicipal de Agua Potable, con un millón 61 mil 270 pesos. 

En 2015 la UdeG no restituyó 9 millones 452 mil 919 pesos de 20 becarios, aquí está el jefe de Gabinete del gobernador, y Kristyan Felype Luis Navarro, secretario de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas, con un millón 558 mil 996 pesos. 

Un comisario estudioso

La UdeG puede autorizarles a sus empleados becas económicas y también licencias para ausentarse de sus labores mientras estudian, así pasa hoy con 12 personas, pero uno destaca, el profesor José Adrián Bayardo Núñez. 

Este becario de la UdeG con permiso para faltar a la docencia, funge como director operativo de Seguridad Pública de Zapopan, cuyo alcalde es Pablo Lemus Navarro, del MC. 

Según los datos brindados por la UdeG, a Bayardo Núñez le fue autorizada una beca por 228 mil 529 pesos, del 1 de octubre de 2014 al 30 de septiembre de 2017, para estudiar un doctorado en la Universidad Carlos III de Madrid, se incluyó el transporte aéreo e instalación. 

Se le dio también una licencia para no impartir clases con ese fin específico, cursar su posgrado en España, con vigencia del 1 de octubre de 2015 al 30 de septiembre de 2016. 

Pero en lugar de hacer maletas, el mismo mes que obtuvo su licencia para faltar al aula –octubre- comenzó a trabajar como director operativo de la Policía zapopana. 

La licencia debe ser con goce de sueldo, pues el portal de nómina de UdeG le arroja pagos emitidos ya durante su ausencia, de octubre de 2015 a febrero pasado –el dato más actual-.

En febrero recibió por su sueldo en la UdeG 25 mil 818 pesos, a esto se añade su beca que también sigue activa, según el portal. En octubre de 2015, cuando ya fungía como director operativo, recibió por su beca  14 mil 253 pesos; en noviembre, 5 mil 121 pesos; diciembre, 5 mil 12 pesos; en enero pasado, 9 mil 21 pesos, y en febrero 8 mil 999 pesos. 

Falta sumar su salario en Zapopan: en febrero, 97 mil 93 pesos; en marzo, 106 mil 445 pesos. Su nombramiento es del 17 de noviembre de 2015, pero desde la segunda quincena de octubre cobró como tal; en nómina su cargo es comisario de la Dirección General de Seguridad.

Todo esto significa que,  por ejemplo en el mes de febrero, este esquema le permitió hacerse de ingresos por 131 mil 910 pesos, según lo reportan ambas instituciones. 

El portal de Zapopan indica que antes de ser director operativo ya laboraba en la Unidad de Apoyo a la Dirección de Seguridad, con 44 mil 119 pesos por mes hasta septiembre de 2015. 

Un video grupero

Que un becario de la UdeG con licencia para estudiar en España, como Bayardo Núñez, sea parte de la nómina de Zapopan es llamativo por varios motivos:

Primero, porque tanto el apoyo económico como la licencia para faltar al aula no han sido cancelados, aunque no dejó el país, y segundo, porque hay evidencia de que el control y supervisión de los directivos de esa Policía sobre sus elementos han sido deficientes. 

El 30 de marzo el alcalde anunció el cese de tres policías porque participaron sin permiso en un video grupero que, se afirma, alienta el feminicidio. Es decir, que esos oficiales pudieron ausentarse de sus funciones y disponer de dos patrullas sin que sus superiores se percataran, o peor, con su colusión. 

El Reglamento de Becas, además, restringe en su artículo 54, fracción VI, las actividades de un becario pues se obliga a  “Abstenerse de ejercer, durante su estancia, cualesquier actividad, que distraiga los objetivos de su programa de formación, sea remunerada o no”.

De 2007 a 2009 la UdeG erogó 46 millones 407 mil 591 pesos en estas becas que han beneficiado a miembros de la cúpula política; las erogaciones de 2010 a 2015 no las transparentó.  

Estas becas puede aprobarlas el Consejo General Universitario (CGU) pero también el resto de los centros universitarios. En ese trienio el mayor monto salió del CGU por 19 millones 422 mil pesos. 

Fue el CGU el que validó, por ejemplo, la beca a Raúl Padilla Padilla, hijo de Raúl Padilla López, el exrector que controla a la UdeG, sin una democratización aún en puerta. En su portal existen siete pagos para el hijo del exrector de julio a diciembre de 2015, por un millón 161 mil 194 pesos. 

Contrastan, pues, los recursos que dirige la UdeG al hijo del ex rector para estudiar en Washington, cuando el gasto anual que destina a un alumno común y corriente es de 42.24 pesos, dice la Estadística Institucional. 

Las siguientes mayores erogaciones son de los centros de Ciencias Sociales y Humanidades, y de Ciencias Exactas e Ingenierías.

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