La Arquidiócesis Primada de México informó que el cardenal Norberto Rivera Carrera ha evolucionado positivamente, luego de haber sido intubado por complicaciones respiratorias tras infectarse con COVID-19 el pasado 16 de enero.
En un comunicado, la Arquidiócesis señaló que, de acuerdo con los últimos reportes médicos y pese a su situación de gravedad, Rivera Carrera mejoró su estado de salud.
Sin embargo, aunque el religioso ya atravesó los días más críticos de la enfermedad, todavía podría presentar complicaciones.
La Arquidiócesis de México pidió al pueblo mexicano “continuar orando” por la pronta recuperación de Rivera Carrera.
Este jueves, el exvocero de la institución religiosa, Hugo Valdemar, informó que desde el miércoles le fue retirado el ventilador al que estaba intubado por complicaciones respiratorias.
Rivera Carrera se contagió con COVID-19 desde el 16 de enero y dos días después entró a terapia intensiva. Inicialmente, el cardenal fue internado en el Hospital Mocel, pero cuando su salud empeoró lo trasladaron a otro nosocomio.
En días pasados, Hugo Valdemar declaró a Proceso que la Arquidiócesis Primada de México se había negado a costear los gastos médicos del cardenal ni brindarle apoyo espiritual; por lo que el lunes pasado un sacerdote externo le brindó la extremaunción, rito que la Iglesia Católica aplica para quienes están próximos a morir.
El exvocero reveló que es la familia del cardenal quien se encarga de sus gastos médicos, específicamente su hermano, Javier Rivera Carrera.
Tras los dichos de Valdemar, la Arquidiócesis respondió que fue el propio Norberto Rivera quien decidió atenderse en el sector privado.
Mejora la salud del Cardenal Norberto Rivera Carrera. pic.twitter.com/8pvw6ndz5a
— Arquidiócesis Primada de México (@ArquidiocesisMx) January 29, 2021