El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) anunció la disolución de sus Municipios Autónomos Rebeldes (MAREZ) y las Juntas de Buen Gobierno. Esto sucede en el contexto de la violencia desatada en Chiapas por el crimen organizado.
A través de un comunicado firmado por el subcomandante insurgente Moisés se compartió que tras una serie de discusiones y reflexiones, la organización política optó por desaparecer dichas instancias.
Por este motivo, ninguna persona podría presentarse como integrante o representante de ellas a partir del pasado domingo 5 de noviembre.
“Las razones y el proceso por el que se tomó esta decisión se las iremos platicando poco a poco en los escritos siguientes. Sólo les adelanto que esta valoración, en su fase final, se inició hace unos 3 años”, se lee en el comunicado.
Se atribuye la decisión a la violencia del crimen organizado
En el comunicado no se detallan los motivos por los que el EZLN tomaron esta decisión. No obstante, el subcomandante Moisés subrayó el daño que el crimen organizado (en alianza con el Gobierno), provocó en el estado.
De la misma manera, la misiva señaló que, por ejemplo, las cabeceras municipales de San Cristóbal de las Casas, Comitán, Las Margaritas y Palenque están ocupadas por lo que la organización denomina “sicarios legales”, o también “miembros del crimen desorganizado”.
Una decisión fundamentada en el análisis crítico y la consulta a las comunidades autónomas de Chiapas.
👉 https://t.co/F8wVsBeKUG#EZLN #Chiapas #AutonomíaZapatista #ConsultaComunitaria #NuevoCapítuloZapatista pic.twitter.com/TjoicnCF59— Avispa Midia (@Avispa_Midia) November 6, 2023
En este contexto, la organización aseguró que los asaltos, secuestros, reclutamientos forzados y balaceras en la región ocurren bajo el “padrinazgo del gobierno del estado y la disputa por los cargos que está en proceso”.
Igualmente el EZLN acusó que trabajadores de las industrias hotelera, turística, restaurantera y de servicios son amenazados por grupos criminales que buscan apoderarse de las principales ciudades de la religión.
Finalmente, a través del comunicado denunciaron que la presencia del Ejército en Chiapas no tiene el objetivo de proteger a la población civil. Por el contrario, los elementos militares únicamente frenan la migración y colaboran con redes de tráfico de personas.
“La trata de personas es un negocio de las autoridades que, mediante la extorsión, el secuestro y compraventa de migrantes, se enriquecen desvergonzadamente”, advirtió también el documento.