El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente destaca que el manejo seguro de los desechos biomédicos y sanitarios es esencial para la salud comunitaria y la integridad del medio ambiente.
Por el contrario, advierte, la disposición incorrecta de tal volumen de productos puede llegar a ocasionar “un efecto de rebote”, tanto en la salud de las personas como al medio ambiente, y de ahí la vital importancia sobre su gestión y disposición final de forma segura como parte de una respuesta efectiva a la emergencia sanitaria.
“El éxito de las estrategias de manejo de desechos depende invariablemente de que se tengan en cuenta, ante todo, los procesos que hayan generado los desechos, y de una adecuada interrelación con los mismos”, dice la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En cuanto a los desechos que se generan en el ámbito del hogar, aunque los guantes, las mascarillas o los medicamentos caducados pueden llegar a mezclarse con la basura doméstica, deberían separarse “y ser recolectados por operadores municipales u operadores de gestión de residuos especializados”, recomienda la organización.
Por su parte, el secretario ejecutivo de los Convenios de Basilea, Rotterdam y Estocolmo, Rolph Payet, pidió a todas las naciones tomar acciones sobre los residuos de la pandemia cuanto antes.
“Al abordar este desafío enorme y sin precedentes, insto a los responsables de la toma de decisiones en todos los niveles, internacional, nacional, municipal, urbano y distrital, a que hagan todo lo posible para que la gestión de residuos, incluidas las fuentes médicas y domésticas, sea una prioridad y se garantice el mínimo impacto de estos flujos de residuos potencialmente peligrosos sobre la salud humana y el medio ambiente”.