En México todas las personas tienen derecho a recibir educación de calidad y gratuita desde el nivel básico, sin embargo, son muy pocas las que llegan a la universidad ejerciendo sus derechos.
Conforme el grado de escolaridad avanza, el número de estudiantes disminuye, siendo la transición entre la preparatoria y la universidad, donde más se reduce la matrícula de alumnos, haciendo de la educación superior prácticamente un privilegio.
Datos de la Secretaría de Educación Pública (SEP) actualizados al 31 de diciembre de 2022, confirman la compleja realidad que el país enfrenta en la materia, simplemente basta comparar el número de alumnos inscritos en el ciclo escolar 2019-2020 con los que había en el periodo 2020-2021 y con el 2021-2022, para ver las consecuencias que situaciones como la pandemia de COVID-19 o la implementación de la Nueva Escuela Mexicana han generado para los estudiantes.
En una mañana agitada con la designación de la nueva titular de la SEP y el retorno a las aulas de miles de alumnos, van algunos datos sobre las 10 entidades en donde el acceso a la educación superior es más difícil. Ojalá sirvan como abono al debate sobre la educación en México. pic.twitter.com/1U7obRi9aa
— Samuel A. Torres-Méndez (@SamTMendez) August 15, 2022
Cuando las clases iniciaron en 2019, en el país habían 25 millones 253 mil 306 alumnos en todos los niveles y modalidades, para el siguiente año la cifra bajó a 24 millones 597 mil 234 estudiantes y el año 2022 se contabilizaron 24 millones 113 mil 780, lo que significa que a lo largo de los últimos tres años, cada vez menos mexicanos han sido capaces de ejercer su derecho a la educación.
Esta realidad se agrava conforme los alumnos progresan en sus estudios, de hecho, las estadísticas de la Secretaría de Educación Pública revelan, que en lo que se refiere a educación primaria y secundaria, México ha hecho una buena tarea, ya que en ambos niveles el promedio de estudiantes que concluyen está por arriba del 85 por ciento, sobre todo en la primaria, donde la deserción es de menos de un punto porcentual y la terminación es de casi el 97 por ciento.
La debacle educativa para los mexicanos comienza en la preparatoria, que es cuando los niveles de deserción aumentan y el porcentaje de eficiencia terminal baja, es decir, el número de estudiantes que concluyen el nivel medio superior.
Durante el ciclo escolar 2021-2022, alrededor del nueve por ciento de las personas inscritas abandonaron las aulas y apenas el 63.6 por ciento terminó su formación académica.
La barrera para acceder a la educación superior
Cifras del 2021-2022 de la Secretaría de Educación Pública pintan una clara perspectiva de las dificultades que enfrentan los mexicanos que buscan obtener una educación de nivel superior en el país.
Esto se da por diferentes motivos como la falta de infraestructura, docentes y cobertura, entre otros.
De acuerdo con estadísticas de la máxima autoridad educativa del país, hasta el 2022, existían 8 mil 539 escuelas de nivel superior, de las cuales, 5 mil 542 formaban parte del sector público.
¿Qué retos enfrenta la educación superior en México? ¿Cómo garantizar el acceso universal y la gratuidad? @JohnMAckerman conversa con @LGlzPlacencia, secretario general de la @ANUIES. #DiálogosPorLaDemocracia🤜
📺Domingo 17 de septiembre, 19:30 h.👉https://t.co/hmkTuuPcuN pic.twitter.com/mUDmUTcUNe— TV UNAM (@tvunam) September 17, 2023
Por su parte, el número de estudiantes que acuden a estas instituciones de carácter público suma un total de 3 millones 252 mil 074 alumnos, entre hombres y mujeres.
A su vez, se cuenta con un total de 268 mil 724 maestros en escuelas públicas, lo que dio como resultado una cobertura de apenas el 30 por ciento a nivel nacional durante el año pasado.
Aunado a esto, se calcula que, del total de alumnos que ingresa a este nivel educativo, 12.1 por ciento obtiene calificaciones reprobatorias durante su primer año, ya sea por falta de preparación en grados anteriores o por ausencias.
El gobierno de México tiene una visión pobre y populista de la educación
Para entender las consecuencias que provoca un sistema educativo como el de México, el cual únicamente ofrece resultados positivos hasta secundaria, Reporte Índigo platicó con Eduardo Backhoff, presidente del Consejo Directivo de Métrica Educativa A.C., quien opina que el modelo que la actual administración busca implementar traerá más problemas que beneficios.
“Para que haya progreso en un país se necesita gente educada capaz de innovar y desarrollar tecnología.
“Sin embargo, este gobierno ha tenido una visión pobre y populista de la educación. No ha sido capaz de ver los beneficios que una formación de calidad traería para el país porque la confunde con los privilegios, entonces la equipara, como si fuera algo malo, con los neoliberales, los privilegiados, los ricos.
“Lo que está buscando es que los nuevos estudiantes tengan una visión más comunitaria, social y afín al pensamiento de la Cuarta Transformación. Si revisamos los postulados de la Nueva Escuela Mexicana, los cuales están basados en la idea de que el neoliberalismo y todo lo que venga de este sistema económico está mal, pues nos podemos dar cuenta de por qué estamos frente a libros de texto que priorizan la promoción de ideas del gobierno en turno en lugar de poner atención al aprendizaje y fomentar el desarrollo de capacidades, inteligencia y habilidades”.
Gobierno propone aumento de uno por ciento para la educación y la mayor parte se va a ir a las becas
México está entre los tres países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos que menos invierte en educación.
De acuerdo con el informe “Panorama de la Educación 2023” de la OCDE, el gobierno gasta menos de 5 mil dólares anuales por cada estudiante, cifra que, al revisar los datos de la SEP, es incluso mucho menor, pues en el ciclo escolar 2021-2022, el promedio de gasto federal por estudiante fue de 27 mil 600 pesos o mil 533 dólares.
A pesar de esto, no se espera que las cosas mejoren para el 2024, ya que de acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación enviado por el Gobierno federal a la Cámara de Diputados, se propone destinar un total de 425 mil 755.5 millones de pesos para este rubro, es decir, apenas 4 mil 207 millones de pesos más que lo aprobado este año, que fue de 421 mil 548.2 mdp.
“En específico, el presupuesto de la @SEP_mx … representa solamente 1 por ciento más que en 2023.
“El #PaqueteEconómico presenta un incremento en el gasto educativo que no corresponde con los retos y rezagos que enfrenta el país. Se mantiene una brecha presupuestaria de 0.81 puntos del PIB, pues la recomendación internacional sugiere destinar entre 4-6 por ciento”, publicó el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria en su análisis del documento.
Nuevo modelo educativo en México es el reflejo de un gobierno populista
De acuerdo con Eduardo Backhoff, presidente del Consejo Directivo de Métrica Educativa A.C., la cantidad de recursos que el gobierno piensa destinar en materia educativa el próximo año, demuestra el poco interés por parte de las autoridades de brindar una formación de calidad, pues el poco dinero que habrá, se planea destinar en su mayoría a fines que no van a resolver ningún problema de fondo, pero pueden beneficiar políticamente al partido en el poder para las próximas elecciones.
“Le han metido dinero a las becas, por el beneficio político que representan, y a las universidades Benito Juárez, las cuales es bien sabido, no ofrecen enseñanza de calidad. Tienen muy poca tecnología, infraestructura y su cobertura es muy baja.
“Aunado a esto, prácticamente han desaparecido las becas y estímulos para que estudiantes o investigadores puedan hacer un posgrado en el extranjero con la intención de estimular que la gente estudie en México, sin embargo, al cerrar estas oportunidades, evitas que los mexicanos puedan ir y desarrollarse en países más avanzados que cuentan con mayor conocimiento que nosotros.
“Si a esto le sumamos los recursos que se quitaron a raíz de la desaparición de los fideicomisos por mandato presidencial, pues nos encontramos frente a una situación muy preocupante”.
Nueva Escuela Mexicana, peligroso experimento educativo en México
Uno de los principales errores cometidos por la actual administración en materia educativa, especialmente después de haber atravesado la pandemia de COVID-19, de cuyos estragos el mundo aún no logra recuperarse por completo, fue el intento de reestructurar por completo el modelo educativo en el país.
El ejemplo más claro de esto fue la problemática que se suscitó a partir de la creación de los nuevos libros de texto gratuito así como de la llamada Nueva Escuela Mexicana, un modelo que, de fondo, lo que busca es que los nuevos estudiantes tengan una visión similar a la del gobierno lopezobradorista.
“Me gusta lo que dijo Enrique Serna cuando vio lo que estaba pasando con los nuevos libros de texto gratuitos y con el modelo de la Nueva Escuela Mexicana, pues clasificó la estrategia del gobierno en materia educativa como la búsqueda de una ‘educación aldeana’, en lugar de aspirar a implementar modelos de primer mundo”, comenta en entrevista Eduardo Backhoff, presidente del Consejo Directivo de Métrica Educativa A.C.
Mucha lealtad hacia AMLO, pero poca capacidad de la SEP
De acuerdo con el experto en la materia, las malas decisiones que se han tomado a lo largo de este sexenio en cuanto a educación, se deben a la falta de personal capacitado en los puestos clave de la Secretaría de Educación Pública.
“Muchas de estas acciones se han llevado a cabo por ignorancia, simplemente hay que ver quién encabeza la Secretaría de Educación Pública (Leticia Ramírez Amaya) y a las personas con cargos importantes que están tomando decisiones, las cuales, en su mayoría no cuentan con la preparación adecuada para desempeñar su cargo, pero están ahí por ser leales al presidente. Ese gobierno no ha privilegiado las capacidades, la regla ha sido 90 por ciento de lealtad y 10 por ciento de capacidad.
“Entonces no cabe la menor duda que muchas de las decisiones en materia educativa se han tomado sin los conocimientos necesarios”.
Como muestra, está el momento en el que hace un año, públicamente se le pidió a la titular de la SEP explicar el nuevo método a través del cual los niños de primaria aprenderán a sumar y no supo responder.
“Con este modelo vamos a seguir retrocediendo. Es un experimento que me parece muy peligroso porque se decidió llevar a nivel país y en todos los grados, no se hizo gradualmente. Decidieron cambiar radicalmente todo, algo que nunca se había hecho y es totalmente antipedagógico”, dice Backhoff.