La verdadera elección
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) será el fiel de la balanza en la elección del próximo 4 de junio en el Estado de México.
Con la casi nula posibilidad de que haya un acuerdo entre los partidos de izquierda, desde el PRD y el PT ya se acusa que Andrés Manuel López Obrador será el responsable ante la historia, si el PRI vuelve a ganar en el Estado de México.
Imelda García
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) será el fiel de la balanza en la elección del próximo 4 de junio en el Estado de México.
Con la casi nula posibilidad de que haya un acuerdo entre los partidos de izquierda, desde el PRD y el PT ya se acusa que Andrés Manuel López Obrador será el responsable ante la historia, si el PRI vuelve a ganar en el Estado de México.
Hoy, después de que casi se le extendía el certificado de defunción al partido del sol azteca, en las primeras cinco semanas de campaña su candidato a la gubernatura hizo lo imposible: remontó en las encuestas y algunas lo ubican ya en el tercer lugar.
Este reposicionamiento de Juan Zepeda, el abanderado del PRD a la gubernatura mexiquense, ha ocasionado que ahora su partido se convierta en el aliado que todos desean. Los votos que ha ganado a lo largo de la campaña son ahora los más cotizados.
Andrés Manuel López Obrador, presidente nacional de Morena, lanzó un ultimátum hace unos días para que el PRD decline a favor de Delfina Gómez, su candidata a la gubernatura del Estado de México.
El llamado se dio después de que la candidata de Morena, Delfina Gómez, fuera acusada de cometer actos de corrupción en la nómina de Texcoco, cuando fue alcaldesa (2012-2015), al descontar el 10 por ciento de su sueldo a los trabajadores del ayuntamiento.
Según la mayoría de las encuestas, la carrera por la gubernatura es entre dos: Alfredo del Mazo, candidato del PRI, PVEM, Nueva Alianza y PES; y Delfina Gómez, candidata de Morena.
Josefina Vázquez Mota, del PAN; y Juan Zepeda, del PRD, se disputan el tercer lugar.
Por eso es que ahora los partidos buscan hacer sus amarres para la última parte de la campaña. Tanto Morena como el PAN ansían los votos que ha conseguido el sol azteca en las últimas semanas.
No son los únicos apoyos que quieren. El independiente Isidro Pastor, a quien le fue retirada su candidatura, también tiene una base de apoyo que puede sumarse a algún candidato.
La última parte de la campaña comienza mañana, una vez que ocurra hoy el segundo debate.
Faltan 26 días para la jornada de la elección, el 4 de junio; y todo puede pasar, en la elección más importante de este año y la más relevante antes de la sucesión presidencial, en el 2018.
Alfredo del Mazo candidato del pri
Según la mayoría de las encuestas, la carrera por la gubernatura del Estado de México es entre dos, uno de ellos es Alfredo del Mazo, candidato del PRI, PVEM, Nueva Alianza y PES.
Delfina Gómez candidata de morena
La otra puntera en las encuestas es Delfina Gómez, candidata del Movimiento Regeneración Nacional
El ultimátum
Junto a sus candidatos en los tres estados que elegirán gobernador –Estado de México, Nayarit y Coahuila-, Andrés Manuel López Obrador ha dedicado a llevar su mensaje a estos lugares.
De la campaña electoral de este año, el presidente nacional de Morena no ha salido inmaculado.
En medio de la guerra sucia y las acusaciones contra dos mujeres de su partido –Delfina Gómez, candidata en el Estado de México, y Eva Cadena, quien era candidata a la alcaldía de Las Choapas, Veracruz-, López Obrador y su partido se vieron golpeados, aunque no de manera contundente.
Esos golpes asestados a Morena hicieron que López Obrador lanzara este fin de semana un ultimátum a los otros partidos de izquierda para tener una alianza de último momento, de facto.
Pero no llamó a la alianza para vencer juntos al PRI en las tres entidades donde habrá elecciones. Amenazó con que si no se unían a él ahora, no lo harían en el 2018.
“Si quieren la unidad para el 18, que se deslinden ya del PRI, se deslinden de Peña Nieto en el Estado de México.
“Si no hay unidad ahora en el Estado de México, Coahuila, Nayarit y Veracruz, si no hay ahora, ya en el 2018 pues vamos solos; Morena va a ir solo”, dijo López Obrador cuando visitaba Nayarit.
Días antes, el 2 de mayo, López Obrador ya había llamado a los perredistas a votar por Morena.
“Les digo a los militantes del PRD, los llamo a votar por Morena. Eso no es traición; traición es hacerle juego al régimen corrupto (…) desde que firmaron el Pacto por México se asociaron con Peña Nieto. En el Estado de México es clarísimo que están actuando de manera coordinada; es para dividir y que Morena no triunfe en el Estado de México”, acusó en un mensaje difundido en redes sociales.
Las reacciones de los partidos de izquierda no se hicieron esperar. Las culpas apuntan al tabasqueño, si la izquierda pierde la elección en el Estado de México.
“En el fondo no quiere y estaba calculando si le servíamos o no. Nos quiso utilizar y no se vale su actitud socialmente insultante (…) El cobro histórico tendrá que asumirlo Andrés Manuel López Obrador”, afirmó ayer Óscar González, candidato del PT a la gubernatura mexiquense.
Desde el PRD también surgieron voces indignadas por la declaración del tabasqueño; en el Sol Azteca no se les olvida que ellos buscaron a López Obrador para armar un bloque de izquierdas para esta elección. Y ahí también ya lo culpan si el tricolor llega una vez más al poder.
Si gana el PRI, culpa de Andrés Manuel
Juan Zepeda es el candidato que ha hecho lo impensable: de incorporarse tarde a la contienda, tras una elección interna que desgastó al partido en el Estado de México, arrancó con apenas 5 puntos de preferencia en las encuestas; hoy hay algunas que ya le dan hasta 17 por ciento.
Se autodefine como un hombre de izquierda. Al terminar el CCH, emigró a Estados Unidos donde trabajó como indocumentado por 12 años; empezó como lavaplatos y después llegó a ser gerente.
Conforme iba fortaleciendo sus lazos con la comunidad mexicana en Estados Unidos, también comenzó a hacer activismo a favor de los derechos de los migrantes. Incluso, fue encarcelado por participar en movilizaciones.
Regresó a México a cuidar a su madre enferma y se inició al poco tiempo en la política. Ingresó al PRD y a los pocos años fue alcalde del municipio de Nezahualcóyotl (2012-2015); luego, diputado local.
Este hombre, que era conocido solamente en la región oriente del Estado de México, ha ido ganando adeptos en la campaña.
Ahora, Juan Zepeda pide que “no le carguen el muertito” si el PRI gana nuevamente la elección en el Estado de México, porque el PRD buscó hasta el cansancio una alianza con los partidos de izquierda.
“Me cansé una y otra y otra vez (…) Decíamos ‘vamos con la izquierda para ir planteando, desde el 2017, lo que va para el 2018, un cambio de régimen’. No hubo voluntad del otro lado. Y ahora que no me carguen a mí el muertito, que no nos lo quieran cargar, no lo vamos a aceptar.
“Más bien, reviro: ¿neta quieren que saquemos al PRI? ¿neta tienen la voluntad? Pues entonces que declinen por mí, los números nos dan. Y además yo sí tengo claro para qué queremos gobernar”, sostuvo ayer Zepeda.
Luis Sánchez, senador del PRD y coordinador general de la campaña del perredista, reveló que hubo 15 llamados públicos a Morena, desde el Comité Ejecutivo Estatal del PRD, para hacer una coalición de izquierda.
“Y en cada uno de esos llamados recibimos, o el silencio, o la negativa e incluso hasta ofensas. Andrés Manuel, en varios momentos, cuando hablábamos de esa coalición, nos dijo que ‘con el PRD ni a la esquina’”, recordó Sánchez.
Pero no solo fueron los llamados públicos. Perredistas y morenistas se reunieron en varias ocasiones para trabajar en un acuerdo de unidad que permitiera crear un frente electoral de izquierda. Ese acuerdo no se pudo concretar porque no les dieron permiso.
“Yo personalmente me reuní con Higinio Martínez. Nuestro presidente estatal se reunió con Horacio Duarte. Yo hablé con Yeidckol Polevnsky. Y a todos les expuse la gran oportunidad que teníamos de hacer una coalición y vencer al PRI. Y a Higinio Martínez le dije así: ‘Higino, haz historia y vamos juntos, cambiemos el Estado de México.
“Y la respuesta que recibimos es que no se les permitió hacer la coalición con el PRD en el Estado de México. Lo que yo supe, que hubo una reunión de Yeidckol con Andrés Manuel, con Higinio, con Horacio, y que se negó Andrés Manuel a esta coalición”, narró Luis Sánchez.
Ahora que el líder de Morena busca que se le unan las otras fuerzas de izquierda, ante la baja de su candidata, los perredistas se han negado aunque eso pueda significar que el PRI gane una vez más la gubernatura mexiquense.
“¿Quién es responsable? Pues ahí está, es Andrés Manuel; él es el responsable”, sentenció Sánchez.
Del PAN, ni hablar. Juan Zepeda señaló que por convicción propia él fue uno de los que se opuso a conformar una alianza electoral con Acción Nacional, lo que le costó cuestionamientos incluso al interior del PRD.
Zepeda es el candidato con la agenda más liberal. Es el único que ha hablado a favor del matrimonio igualitario, del derecho a decidir la interrupción del embarazo o la legalización de la mariguana.
Por eso, dice, no podría declinar a favor de un partido de derecha y tampoco de uno que se dijera de izquierda, pero no defendiera esas banderas.
Los perredistas ponen sus esperanzas ahora en los indecisos que representan una buena parte del electorado de la entidad. Saben que si logran convencer que su candidato no tiene señalamientos de corrupción y tiene propuestas realizables, pueden ser la revelación el día de la elección.
“Sereno, moreno”, llama Juan Zepeda a López Obrador, “el 4 de junio nos veremos y vamos a dar una sorpresa”.
Pastor: el otro factor
A Isidro Pastor no lo dejaron llegar a ser candidato independiente. Luego de que presentó 413 mil firmas para conseguir su registro, el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) le dio el revés al acusar que había entregado miles de firmas con inconsistencias.
El asunto llegó hasta el Instituto Nacional Electoral y al Tribunal Electoral del Estado de México, pero el IEEM nuevamente le negó la posibilidad de ser candidato independiente. El tiempo se agota y las autoridades electorales no dan una solución positiva a su reclamo.
Ahora, Isidro Pastor ya considera la posibilidad de otorgar su apoyo a alguno de los candidatos de los partidos.
Por su pasado como militante del PRI, Pastor cuenta con una estructura en todo el estado que, dice, está dispuesto a poner al servicio de un candidato que pueda obtener el triunfo.
“Hasta el día de ayer no lo tenía considerado. Pero hoy estoy con serenidad, con reflexión, pensándolo. Hoy estoy viendo si tomo alguna decisión al respecto. Puedo decir que haré las consultas con la gente (…) y yo creo que a más tardar en una semana tendré una resolución al respecto”, afirmó Pastor en entrevista.
Para solicitar su apoyo, aseguró, se le han acercado personas cercanas a “más de dos” candidatos a la gubernatura, pues saben que la estructura que formó siendo priista y funcionario del Gobierno estatal, pueden significar la diferencia el día de la elección.
“Soy pragmático; y creo que el pragmatismo es una filosofía que puede dar buenos resultados”, asentó.
Aunque no quiso revelar a qué candidato apoyará, sí aseguró que su apoyo no será para el PRI ni para su candidato, Alfredo del Mazo, porque el tricolor ya tuvo su tiempo para gobernar y no pudo solucionar los problemas de la entidad.
“¿Cómo es que están diciendo: este hombre va a resolver el problema de la inseguridad, del ingreso familiar o el problema de salud? Pues claro que no. Me parece que no es honesto decir que van a solucionar el actual problema que viven en este momento si ellos son gobierno.
“El PRI ha agotado su tiempo en el gobierno para dar resultados. Todos los problemas que hoy prometen resolver, pues no se han resuelto. ¿Por qué creerle que sí los va a resolver?”, cuestionó.
Isidro Pastor considera que el Sistema se lanzó de forma “furibunda” en su contra, pero dice que su esfuerzo será echado por la borda pues son muchos mexiquenses los que ya no quieren lo mismo de siempre.