El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte pasará 9 años en prisión luego de declararse culpable de asociación delictuosa y lavado de dinero, pero solo fue de dientes para afuera.
Por recomendación expresa de su abogado, Ricardo Antonio Sánchez Retana, el ex mandatario asumió su culpa y se vio beneficiado con la reducción de la pena que le espera, aprovechando el nuevo sistema de justicia penal.
La defensa de Duarte informó que aceptó su culpa solo por ser requisito para el juicio abreviado y que no existe prueba que lo culpe.
“Únicamente porque la Ley procesal en vigor obliga al imputado a aceptar su responsabilidad por el delito que se le acusa, es que mi defendido admitió ser partícipe en los hechos no hay medio de prueba alguno dentro de las constancias que integran el expediente penal que acredite que algún recurso proveniente del Gobierno del Estado de Veracruz hubiera ingresado al patrimonio del Dr. Duarte de Ochoa de forma ilegal”, informaron.
El juez que llevó el juicio abreviado lo sentenció a nueve años de prisión, además de 990 días de multa y ordenó el decomiso de 40 bienes.
Fuentes cercanas al caso revelaron que desde hace casi un mes, los abogados de Duarte negociaron con la Subprocuraduría de Delitos Federales la declaración de culpabilidad para obtener los beneficios.
La PGR tenía previsto presentar ayer ante el juez de control, Marco Antonio Fuerte Tapia, un total de 110 pruebas en su contra y había pedido una pena de 25 años.
El exmandatario asumió su culpa y se vio beneficiado con la reducción de la pena
La segunda audiencia se llevó a cabo a las 16:00 horas en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, en la que se tenía previsto que ambas partes presentaran las pruebas, se debatiera su legalidad y se anexaran al juicio.
Se espera que ahora la autoridad ponga en manos del Servicio de Administración de Bienes Asegurados las propiedades aseguradas a Duarte. Los recursos pasarán a formar parte de la Tesorería de la Federación.
Duarte aún enfrenta dos procesos más, promovidos por la Fiscalía de Veracruz y con esta pena no alcanzaría el beneficio de continuar su proceso en libertad.
No pierde la sonrisa
El senador de Movimiento Ciudadano, Samuel García quien estuvo presente en la segunda audiencia de Javier Duarte narró que durante toda la jornada el exgobernador nunca perdió la sonrisa.
“Nunca había estado tan cerca de Javier, estuve a unos metros, se la pasó riéndose en el receso, traía un look hipster y hasta con cara de demencia cuando volteaba a ver a los reporteros, al juez, se me quedaba viendo riéndose”, narró el legislador.
García dijo que durante la sesión se dijo dos veces que la esposa de Duarte, Karime Macías, era quien mandaba lo que provocaba más risas del acusado.
El legislador dijo que durante la audiencia se mencionó que durante la noche era cuando se ordenaban los desvíos a través de Black Berry o por un teléfono rojo.
