El viernes pasado fue un día memorable para los republicanos en Estados Unidos. Y con el fallo del caso Roe vs Wade, el expresidente Donald Trump aprovechó para festejar.
De acuerdo con medios locales, el magnate incluso se dio el crédito de la resolución de la Corte, pues fue durante su periodo administrativo que tres de los jueces que ahora representan el tribunal obtuvieron su lugar, logrando con ello una mayoría conservadora.
“Esto fue posible porque entregué todo según lo prometido, incluida la nominación y la confirmación de tres constitucionalistas muy respetados y fuertes en la Corte Suprema”, mencionó el empresario.
Con esa declaración, el expresidente hizo ver que el Trumpismo sigue más que vigente en la Unión Americana, lo que le podría facilitar su regreso a la Casa Blanca para 2024 o el de uno de sus allegados.
Óscar Abad Corral, internacionalista de la UNAM y docente de la Universidad Anáhuac, comenta que la última decisión de la Corte, además de beneficiar a Donald Trump para su regreso a la presidencia, podría favorecer a su partido de cara a las próximas elecciones legislativas.
“Con el resultado de la Corte, Donald Trump está tratando de generar mayor empatía con los grupos conservadores, con lo cual podría verse beneficiado en materia electoral”, dice.
En ese sentido, si el expresidente logra mantener el respaldo de sus electores por los próximos cuatro meses, podrían obtener la mayoría de los 34 escaños competidos en el Senado, lo que haría más complicado el panorama para Joe Biden.
Sin embargo, dependerá de las acciones que de ahora en adelante lleven a cabo los demócratas lo que podría beneficiar o no al mangante, como no dejar de lado las luchas en favor de los derechos de las minorías y combatir el odio que el exjefe de Estado logró expandir en casi todo el país.
Es de los estadounidenses que aún defienden el derecho al aborto, la igualdad de género y respaldan a la comunidad LGBTI+ de donde los demócratas deben sujetarse, pues gracias a ellos seguirá habiendo una esperanza para que Donald Trump no regrese al poder.
En caso de que lo logren, el próximo gobierno demócrata tendrá un reto monumental, empezando con la nominación de al menos un juez para que se integre a la Corte, y sólo así se genere un contrapeso político en favor de la libertad y los derechos humanos.
