En el Partido Revolucionario Institucional (PRI) de Nuevo León se avecina un conflicto interno por la renovación del Consejo Político, órgano estatal que tiene siete años sin cambios y cuyas posiciones podrían generar disputas mayores.
El 10 de febrero de 2012 fueron electos sus integrantes por un periodo de tres años, que concluiría en 2015. El 12 de febrero de ese año, el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) autorizó una prórroga y el 26 de enero de 2016 otra de 90 días con el objetivo de renovar la dirigencia para el periodo 2016. El 8 de septiembre de 2017 hubo un tercer plazo. La última consideración venció el 1 de mayo de este año.
Fue el 6 de abril de 2019 cuando el Consejo Político Estatal de Nuevo León designó a Pedro Pablo Treviño y Lorena de la Garza como presidente y secretaria general, sustitutos del Comité Directivo Estatal.
Existe inconformidad de varios priistas con mucha aceptación entre la militancia, que han pujado desde hace varios años por renovar este órgano estatal. Incluso, han solicitado la intervención del CEN priista.
Pero más allá de la renovación de la Comisión Política estatal tricolor, que fue ordenada inmediatamente por la Comisión de Justicia Partidaria del CEN priista el 19 de septiembre, este órgano tendrá que elegir al nuevo dirigente tricolor para el próximo periodo.
Yo escucho a todos, trato de negociar con todos y la renovación tendrá ese matiz. Obviamente hay conflictos, diferentes puntos vista, hay encono en diferentes grupos dentro del partido, pero el trabajo mío como dirigente es que esas diferencias se puedan resolver sin afectar el instituto político
El fallo del CEN deriva de recursos promovidos por Felipe Enríquez, quien fue secretario de Acción Electoral del PRI, junto con el militante Ramón Salas, para la protección de los derechos partidarios de los priistas ante la Comisión de Justicia de este partido. Ambos consideran que este Consejo Político está vencido y ocupado por priistas afines al exgobernador Rodrigo Medina.
Ante esto, Treviño reconoció que sí existe un vencimiento y asegura que buscará que desde este mes arranque su renovación.
“Yo siempre he sido lo más incluyente, articulé la unidad para que Adrián de la Garza fuera alcalde de Monterrey en la segunda elección, y ganamos. Acá es igual, tendrán que estar en el Consejo todos los que merecen un espacio en el partido. Yo termino a finales de febrero y la verdad es que yo estoy listo para hacerlo”, dijo.
Priistas como Héctor Gutiérrez de la Garza, Abel Guerra y Enríquez han conformado un bloque para que se cumpla con esta renovación, que sería clave para las candidaturas de 2021. Gutiérrez y Enríquez buscarían dirigir el PRI de Nuevo León, y tendrían el apoyo de Guerra.
Por otra parte, el diputado local Francisco Cienfuegos y el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, conforman el grupo medinista que busca tener posiciones en el Consejo Político. Para ocuparlas, suenan nombres como el de Álvaro Ibarra, quien ya estuvo en la presidencia de este órgano, y Manuel Cavazos.
PRI Nacional Contra agendas personales
El secretario de Acción Electoral del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Felipe Enríquez, está a favor de la competencia interna, pero reprueba las agendas personales.
La competencia en política es buena y no veo mal que actores políticos de Nuevo León busquen consolidar sus posiciones, eso no está mal. Lo que está mal es la construcción de agendas dobles, agendas personales
Enríquez menciona que el liderazgo debe buscar el bien colectivo y no individual.
“Lo que no se vale es decir por un lado una cosa y por agenda personal hacer otra. No está mal que actores busquen consolidar su fuerza y presencia en un partido político, es la esencia del liderazgo, el poder para llegar al bien común, no al bien personal”, afirma.
A propósito, el político priista acusa al coordinador de la bancada tricolor, Francisco Cienfuegos, de construir un grupo legislativo basado en la corrupción.
“Yo específicamente he hablado del coordinador de la bancada, que lo he bautizado como el coordinador de la corrupción, como un grupo de diputados bajo una sospecha por actos de coacción política para formar grupos parlamentarios”, señala.
