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Una vez más la sucesión en la presidencia del Poder Judicial del Estado pone frente a frente al gobernador Rodrigo Medina y a la actual presidenta, la magistrada Graciela Buchanan.
Para la elección del nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia –programada para este jueves- están apuntados dos magistrados que aspiran a este cargo y cada uno representa los intereses de un grupo diferente.
Esta vez el magistrado Gustavo Adolfo Guerrero se presenta como el candidato oficial que tiene el respaldo de la administración estatal que encabeza el gobernador Rodrigo Medina.
Guerrero es un hombre experimentado que busca este puesto que ya ocupó en dos ocasiones anteriores: la primera vez durante el sexenio panista de Fernando Canales y la segunda con el exgobernador Natividad González Parás.
Guerrero disputará el cargo con el magistrado Ángel Mario García Guerra, considerado el delfín de la presidenta saliente, la magistrada Buchanan.
García Guerra tiene apenas cinco años como magistrado del TSJ. Su carrera judicial comenzó en el 2001 cuando fue designado Juez Cuarto de lo Penal en el Estado y después continuó como Juez Primero de lo Penal.
Es conocido porque fue el juez que llevó el caso de Diego Santoy, condenado por el asesinato de los hermanos Erick y María Fernanda Peña Coss hace más de seis años.
Este jueves los 16 magistrados que integran el Tribunal Superior de Justicia elegirán a su nuevo presidente y se espera –como hace dos años- una elección tan reñida como la que ganó Buchanan.
En el 2011, Buchanan logró lo equivalente a una gesta: se impuso en la elección al magistrado Francisco Javier Mendoza Torres, quien no sólo era apoyado por el presidente saliente, Jorge Luis Mancillas, sino era impulsado también desde el Palacio de Gobierno.
Buchanan se impuso al candidato oficial por un voto de diferencia.
La designación de Buchanan como presidenta del Poder Judicial del Estado fue una victoria sin precedentes en la historia de este órgano y marcó sus relaciones con el gobernador en turno.
Por primera vez la autonomía del Poder Judicial con respecto al Poder Ejecutivo fue visible.
Dos años después, la disputa por este trono enfrenta otra vez al gobernador Rodrigo Medina con el grupo que encabeza Graciela Buchanan y Carlos Emilio Arenas Bátiz.
A diferencia de hace dos años, Buchanan hoy tiene lo que podría ser una debilidad: quiere ser integrante del Consejo de la Judicatura Federal.
Los que conocen a Buchanan aseguran que la magistrada no cederá la posición que obtuvo en el Poder Judicial del Estado a cambio de una silla en el Consejo de la Judicatura Federal.
Buchanan es una de las candidatas que la Comisión de Justicia del Senado ha entrevistado para este cargo federal, para el que requiere forzosamente el apoyo de los principales partidos: PRI, PAN y el PRD.
Por ello, un veto del gobernador Rodrigo Medina en el PRI podría sepultar las aspiraciones de la magistrada Graciela Buchanan.
Y ella lo sabe muy bien.
La candidatura de Gustavo Adolfo Guerrero se supone que tiene el apoyo de los magistrados Jorge Luis Mancillas y Francisco Javier Mendoza, quienes hace dos años fueron vencidos por la alianza Buchanan-Arenas Bátiz.
El grupo que encabeza el magistrado Genaro Muñoz Muñoz, será clave este jueves en la votación: hace dos años apoyó a Buchanan, pero hoy se desconoce por quién se inclinará el expresidente del TSJ.
La primera opción por la que apostaba Buchanan para continuar con su proyecto en el Tribunal Superior de Justicia era el magistrado Carlos Emilio Arenas Bátiz, quien hace dos años jugó un papel crucial en su designación.
Fue Arenas Bátiz quien increpó en la sesión al presidente saliente Jorge Luis Mancillas cuando éste intentó imponer su voto de calidad –de manera ilegal- para romper el empate que existía entre Buchanan y Francisco Mendoza.
Pero el lunes Arenas Bátiz se autodescartó como aspirante a través de su página de Facebook.
“Una aclaración: No seré candidato a la presidencia del Poder Judicial de Nuevo León”, escribió el magistrado en su página personal.
El próximo año concluye su periodo de 10 años por el cual fue elegido Arenas Bátiz como magistrado.
Existe la posibilidad de que sea reelecto 10 años más, pero esa decisión recaerá en el Congreso del Estado.
La votación de este jueves no sólo pondrá a prueba una vez más la autonomía que supone goza el Poder Judicial del Estado con respecto al Poder Ejecutivo estatal.
También definirá posiblemente el futuro de Graciela Buchanan y su posición en la historia de este órgano que debe ser independiente.
El candidato de Medina
> Gustavo Adolfo Guerrero Gutiérrez
> Egresado de la Licenciatura en Ciencias Jurídicas de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
> Inició en 1981 su carrera judicial como escribiente del Juzgado Primero Familiar del Tercer Distrito Judicial del Estado.
> En el año 1993 es designado Juez Octavo de lo Familiar y en 1999 como magistrado de la Tercera Sala Civil.
> Se desempeñó como presidente del Tribunal Superior de Justicia de Nuevo León, entre el 2001 y el 2003.
> Fue electo otra vez presidente del Tribunal Superior de Justicia para el periodo 2007-2009.
> En la actualidad se desempeña como magistrado de la Primera Sala Unitaria Civil del Estado.
El sucesor de Buchanan
> Ángel Mario García Guerra
> Egresado de la Facultad de Derecho y Criminología de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
> Comenzó en 1999 su carrera en el PJE como Visitador Judicial del Consejo de la Judicatura del Estado.
> En el 2001 se le designó Juez Cuarto de lo Penal del Tercer Distrito Judicial del Estado, con sede en el municipio de San Nicolás.
> En el 2008 fue nombrado Magistrado del Tribunal Superior de Justicia.
> Actualmente es magistrado de la Duodécima Sala Penal Unitaria del Estado.
¿Cómo es el proceso?
> El Presidente del Tribunal Superior de Justicia será electo por el Pleno mediante votación secreta y durará en su cargo dos años.
> No se permite la reelección para el periodo inmediato.
> El Pleno del Tribunal Superior de Justicia está integrado por 16 magistrados.
> La sesión del Pleno en la que se elija al Presidente será válida con la presencia de dos terceras partes de sus integrantes.
> La reunión es pública.