La bancada del PRI en la Cámara de Diputados anunció que para el 2018 no existirá más el Fondo para el Fortalecimiento de la Infraestructura Estatal y Municipal (Fortalece), conocido por ser el fondo de los “moches”.
En dicho Fondo, los diputados podían asignar dinero a municipios y obras de su preferencia con total discrecionalidad; aunque para el ejercicio del dinero sí se establecían reglas de operación.
Sin embargo, los legisladores dejaron activos otros fondos y programas del Ramo 23, el más discrecional de todos, que son utilizados para hacer obras.
Destaca, por ejemplo, el de Fortalecimiento Financiero, que al pertenecer a la categoría de “subsidios” no opera con reglas de operación y tiene muchos más recursos que el Fortalece; tan solo este año tiene asignados 20 mil millones de pesos, 11 mil millones de pesos más que el Fortalece.
El mayor escándalo del Fortalece –que conjuntó recursos destinados a la pavimentación, cultura y deporte en estados y municipios- surgió por las denuncias que hicieran varias personas sobre el moche que pedían diputados a cambio de asignar recursos públicos a ciertos municipios o darle las obras a determinadas empresas.
No más asignaciones
En la negociación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) del 2017, los diputados pudieron asignar libremente 20 millones de pesos cada uno, lo que daba un total de 10 mil millones de pesos.
César Camacho, coordinador del PRI, afirmó que su fracción decidió no reactivar este Fondo, que como cada año, fue enviado en ceros por la Secretaría de Hacienda, pero al que los legisladores asignaban recursos multimillonarios.
“El PRI plantea la desaparición del Fortalece. El dinero no sobra, en consecuencia, la Comisión de Presupuesto tendrá la oportunidad de que si en ese manejo de recursos, en esta reasignación, la prioridad la siga llevando la reconstrucción nacional”, afirmó Camacho.
Reporte Índigo publicó este martes que uno de los fondos susceptibles de ser desaparecidos para tener más dinero para la reconstrucción sería el Fortalece, uno de los fondos del que disponían los legisladores.