Tres presuntos delincuentes fueron detenidos por elementos de Fuerza Civil luego de un enfrentamiento registrado en el municipio de Salinas Victoria, Nuevo León, hechos ocurridos durante la noche de ayer jueves.
El enfrentamiento se registró a la altura del fraccionamiento privado Valle de Castilla; los policías estatales aseguraron a los integrantes del grupo delincuencial varias armas largas, cargadores y droga que fue puesta a disposición de las autoridades correspondientes.
Se informó que los delincuentes eran perseguidos por Fuerza Civil desde la carretera a Salinas Victoria y se refugiaron en un terreno baldío, para después cruzar la última calle de esta colonia privada donde finalmente fueron capturados.
Los detenidos no fueron identificados y las autoridades no brindaron mayor información al respecto; ningún policía resultó herido.
A través de sus redes sociales, el secretario de Seguridad en Nuevo León, Gerardo Palacios, refirió que los delincuentes viajaban a bordo de un vehículo y que el operativo se ejecutó de forma rápida.
En el sitio, durante los hechos sobrevoló el helicóptero de la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
Hombres fingen ser ministeriales para extorsionar
Por hacerse pasar por ministeriales, dos hombres fueron detenidos por la autoridad cuando estaban extorsionando a un empresario, en el municipio de Escobedo, en la colonia Valles de San Francisco.
Fueron elementos de la Agencia Estatal de investigaciones quienes observaron como el dueño de un tractocamión era extorsionado por los hombres, por lo que se acercaron a indagar y detuvieron a los delincuentes que tripulaban un auto parecido a una unidad oficial.
Ambos extorsionadores portaban uniforme parecido al de la corporación ministerial y a sus víctimas les pedían 50 mil pesos en efectivo para evitar que les quitaran los vehículos de carga o que fueran detenidos.
La autoridad les aseguró un arma de fuego, una navaja y municiones; ellos fueron identificados como Marco Antonio, de 51 años de edad, quien anteriormente se desempeñaba como agente ministerial; y Gerardo “A”, de 35, quien era escolta, aunque la autoridad no reveló la fecha de ingreso de ambos ni las razones de su salida de la corporación.
