Desechables ‘amigables’
De acuerdo a los datos más recientes del Instituto Nacional de Ecología, México produce alrededor de 350 mil toneladas de unicel al año. Solo el uno por ciento se recicla y su degradación podría tardar de 500 a 800 años.
Un informe de la organización GreenPeace, precisa que el unicel contiene dioxinas que son cancerígenas, sustancias que se liberan al calentar la comida en este tipo de recipientes. Aunque las consecuencias a la salud son por su uso prolongado, incluso cotnienen en algunos casos ciertos niveles de estireno, que pueden afectar la salud reproductiva.
Jonathan Ávilahttp://youtu.be/MDm0e_AmULc
De acuerdo a los datos más recientes del Instituto Nacional de Ecología, México produce alrededor de 350 mil toneladas de unicel al año. Solo el uno por ciento se recicla y su degradación podría tardar de 500 a 800 años.
Un informe de la organización GreenPeace, precisa que el unicel contiene dioxinas que son cancerígenas, sustancias que se liberan al calentar la comida en este tipo de recipientes. Aunque las consecuencias a la salud son por su uso prolongado, incluso cotnienen en algunos casos ciertos niveles de estireno, que pueden afectar la salud reproductiva.
A lo largo del día, es común entrar en contacto con el unicel, por ejemplo al comprar un café en la tienda de autoservicio, adquirir comida rápida, o simplemente para evitar lavar los trastes al terminar una fiesta familiar.
Aunque sus ventas aún son por mayoreo y para restaurantes y cafeterías, Packgreen ofrece a sus clientes productos biodegradables que, según sus palabras, están pensados en el medio ambiente y la protección de la tierra.
“Nosotros estamos ofreciendo una nueva alternativa que es, seguir con nuestra vida rápida de usar desechables, rápido todo, pero bueno, dejas de contaminar” explicó Anabel Hurtado, fundadora del proyecto y actual directora general.
Packgreen nació hace dos años y medio después de un proyecto universitario y en la búsqueda de opciones que generaran recursos para Anabel y su co-fundadora, quién actualmente ya no se encuentra trabajando en la empresa.
Anabel Hurtado afirma que los desechables biodegradables son una mejor opción pues en su creación está la idea de que se pueda utilizar para la creación de composta en 90 días, esto gracias a su materia prima.
“Este desechable al momento en que se va a la basura, no se va a tardar mil años, se va a tardar un año, año y medio, si no está dentro de una composta, pero si se mete a una composta va a tardar 90 días. Entonces es una gran alternativa, una nueva manera de dejar de contaminar, sobre todo a través de los desechables”, dijo Hurtado.
Agrega que el uso de este tipo de productos debe ser incentivado por los negocios particulares en donde la gente llega de manera rápida, ya sea por un café o un desayuno que se debería llevar en utensilios desechables biodegradables para que se cree una conciencia respecto al tema ambiental.
A pesar de que los productos de packgreen solo han sido vendidos por mayoreo a comercios establecidos, Anabel explica que cualquier persona puede acercarse a ellos para la adquisición de cualquier utensilio que necesite.
Sus productos abarcan desde los comunes platos, vasos y tenedores, así como vasos de café y recipientes para llevar comida. Están hechos con bagazo de caña y fécula de maíz, de acuerdo al tipo de producto.
De acuerdo a Anabel los desechables que ofrecen son todavía importados pues su producción en el país es todavía nula, pero se pretende, en un futuro, crear sus propios productos y mejorar el precio con los clientes.
“El unicel no vuelve a la tierra y contamina por muchísimos años” señala, además de que según el informe de GreenPeace también puede ocasionar cáncer, aunque la Asociación Nacional de Industrias de Plástico niega rotundamente que existan elementos para considerar que el unicel sea un producto cancerígeno.
Anabel Hurtado concluye que se debe incentivar el uso de los productos biodegradables pues estos vuelven a la tierra y de alguna manera regresa “a la tierra lo que es de la tierra”. Y exhorta a las personas que exijan en sus establecimientos favoritos, el uso de este tipo de productos que pueden ayudar a generar una nueva conciencia.
Pues además menciona que el pensamiento ecologista ya ha ido penetrando en los mexicanos y por lo tanto la existencia de estos productos ayuda a esos pensamientos alternativos.
“La conciencia aquí en México ha cambiado bastante, entonces ya está cambiando un poquito el ‘chip’ del ‘aunque me cueste más, pero lo voy a hacer’, entonces, en términos generales ha beneficiado en el que más empresas se han unido a este movimiento, a comprar, hacer el esfuerzo” concluyó Hurtado.