Con desenfado y lejos de la solemnidad, Jairo Calixto Albarrán aborda en su más reciente libro “El derechairo que vendió su Ferrari”, del sello Penguin Random House, las características de la derecha nacional y extranjera como un ejercicio de desfogue ante la polarización actual.
En entrevista con Reporte Índigo, el también autor de “Haz patria, educa a un derechairo” (Aguilar, 2022), la primera entrega de una saga en construcción ilustrada por el monero Tacho, afirma que quienes simpatizan, representan y defienden a los partidos de ideología conservadora en México carecen de una propuesta política que atienda las necesidades de la sociedad actual, pues no han andado los caminos de la autocrítica y la reflexión, no obstante que el enojo parece ser su único refugio.
Entre risas y referencias al desempeño de la oposición en el proceso electoral 2023-2024, Calixto Albarrán señala vía telefónica que “la primera definición de estupidez es tratar de tener resultados distintos haciendo las mismas cosas”.
Lo anterior, al recordar los resultados que obtuvieron los partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática en la contienda por la Presidencia de la República, en donde su candidata, Xóchitl Gálvez Ruiz, consiguió cerca de 20 millones de votos menos que la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, emanada de un partido que el 9 de julio de 2024 celebró apenas una década de obtener su registro.
— Omar F. (@friasomar8) May 16, 2024
La suma de la votación emitida en el territorio nacional y en el extranjero contabilizada por el Instituto Nacional Electoral indica que Gálvez Ruiz acumuló un total de 15 millones 620 mil 726 sufragios a su favor; mientras que por Sheinbaum Pardo votaron un total de 33 millones 226 mil 602 personas; y a Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano, lo respaldaron 5 millones 832 mil 105 votantes.
“El primer libro tiene la idea de tratar de educar a los ‘derechairos’, de llevarlos a la civilización porque son gente muy cavernicolita; el segundo tiene un sentido más terapéutico en el sentido de que el ‘derechairo’ pueda darse cuenta de sus errores, de sus pifias, de las cosas que ha venido repitiendo de manera torpe y necia y que, al final, se revelan en el hecho concreto de la derrota electoral. Ellos creen que lo hacían muy bien y resulta que lo habían hecho todo mal. Ya se les había advertido, como diría mi mamá ‘se les dijo’”, expresa.
Misoginia, lastre a enfrentar para Claudia Sheinbaum
El resultado de los comicios del 2 de junio no solo significa la continuidad de la Cuarta Transformación (4T) al mando del Estado mexicano, también representa la llegada por primera vez en la historia de una mujer al Poder Ejecutivo federal, hecho que el conductor y aprendiz del cabaret califica como un logro importante.
“Es relevante en términos de la historia de machismo y de misoginia que ha vivido este país a lo largo del tiempo, ya solo por eso es una cosa interesante, además, ella viene de luchas de toda la vida, de una familia de izquierda, sus luchas sociales han estado a la vista de todos y tiene una formación científica.
“En este momento se enfrenta a una profunda misoginia, por parte de la propia Denise Dresser o Xóchitl Gálvez, quienes la acusan de que ella nada más es el parapeto que va a ser usado por (Andrés Manuel) López Obrador, como si ella no fuera capaz de construir una idea, de construir una propuesta, cuando hemos visto que sí, su paso por el Gobierno de la Ciudad de México ha sido eso”, subraya Calixto Albarrán.
Indica también que la misoginia en el país está latente y no es un fantasma, sino es un monstruo real, que existe y prevalece.
‘Pierdes amistades, ganas camaradas’
Jairo Calixto dice que, a más de un mes de las elecciones, las voces opositoras mantienen su discurso de subestimar al electorado mexicano calificándolos de “tontos y zombies” por no apoyar su proyecto de nación. Narrativa que en el último sexenio ha abonado a un quiebre en el debate público frente al pensamiento que comulga con la 4T.
“Al principio sí me pesaba un poco perder amistades, parientes, conocidos de camión, amigos de borrachera, porque dices ‘¿cómo es posible que la intolerancia llegue tan lejos?’, pero luego mi querido amigo Federico Bonasso hizo una reflexión de qué causaba esta pérdida de amigos con quienes habías compartido el pan, la sal, el trago y hasta la novia: Al final de cuentas pierdes viejos amigos, pero ganas nuevas camaradas”, manifiesta.
Sin embargo, afirma que en numerosas experiencias ha podido constatar que, más allá de las ideologías, la solidaridad y la empatía en una familia o una comunidad han salido avante.
Incursión al mundo actoral, proceso de reinvención
En los últimos años, el periodista ha incursionado en la actuación y el cabaret con diversas interpretaciones en la televisión pública, entre ellas, una parodia de la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña. Al respecto, detalla que es parte de un proceso de reinvención.
“Eso no estaba en mi propósito de vida, subirme a un escenario o hacer sketches, pero con todo el trabajo que he venido haciendo por años entiendo perfectamente cómo funciona la mente derechosa, cómo se maneja, cómo se construye, cómo se genera, aunque sigo escribiendo mis columnas y estos libros, eso me da la oportunidad de hacerlo de una manera sucinta, más clara, divertida, con gestos, con actuación, con disfraz y maquillaje.
“Un día algún amigo me dijo ‘tienes que reinventarte’ y dije ‘¿qué es eso? ¿Cómo diantres se reinventa uno?, ¿dónde está el manual de reinvención o dónde se compra el jarabe? Y es eso, hacer cosas distintas, arriesgarte un poco, perder el miedo al ridículo y lanzarse al ruedo”, concluye.