Activistas denunciaron que una mujer, identificada como Julissa, fue discriminada y se violentaron sus derechos humanos en Mérida, Yucatán.
Hace algunas semanas, Julissa ingresó al Hospital Dr. Agustín O´Horán ubicado en Mérida, para dar a luz a su segunda hija, durante su estadía en este lugar la trabajadora social le realizó preguntas para conocer su orientación sexual.
Cuando las autoridades médicas se percataron que Julissa era lesbiana actuaron de manera lesbofóbica y decidieron arbitrariamente quitarle a su hija recién nacida y a su otro hijo de seis, pues consideraron que no estaban seguros con su madre.
Actualmente ambos se encuentran en albergues del Sistema DIF del estado.
Activistas alzan la voz por caso de Julissa en DIF de Yucatán
La activista Ana de Alejandro, quien está acompañando el caso de Julissa junto con la asociación Red de Madres Lesbianas, señaló que Julissa fue discriminada por ser lesbiana.
“A Julissa le dijeron que le quitaban sus hijes para protegerles de la posible violencia que ella podía ejercer, que no está comprobada. Sus vecinas dicen que es una madre amorosa y cuidadosa. ¿Quién protege a les hijes de Julissa de la violencia que está ejerciendo el Estado?”, dijo en un tuit.
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🧵Desde la @RedMadresLesbMX
Red de #MadreslLesbianas en México, llevamos ya una semana dando dando seguimiento al caso de Julissa, mujer a la que el Gob de Yucatán le quitó sus hijos por ser Lesbiana.
➡️— Ana De Alejandro (@AnaDeAlejandro) November 23, 2022
DIF responde
En respuesta a los señalamientos, el DIF de Yucatán afirmó en un comunicado que la mujer fue señalada por la institución de maltratar a los infantes, luego de que autoridades médicas comunicaran que sus hijos presentaban evidencias de malos tratos.
“Frente al riesgo en que se encontraban los niños, pasaron a estar bajo tutela del Estado… siempre priorizando la seguridad y correcto desarrollo de los menores”, señaló.
El DIF de Yucatán señaló que esta acción se dio en respuesta al llamado que las autoridades recibieron del personal del hospital el 26 de octubre.
También argumentó que el menor de 6 años no estaba registrado, no acude a la escuela y muestra signos de violencia, “resultando que no se restituye en su totalidad sus derechos para vivir en condiciones dignas y para su sano desarrollo”.
Cabe señalar que alrededor de una decena de personas acudieron junto con Julissa para apoyarla en la Procuraduría de Protección de Niñas y Niños y Adolescentes (Prodennay).
