El anterior Gobierno de la Ciudad de México manipuló cifras para aparentar menos delitos.
Ernestina Godoy Ramos, titular de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) local, informó ayer en conferencia de prensa que de enero a noviembre del año pasado más de 29 mil registros de delitos fueron maquillados por la Dirección General de Política y Estadística Criminal, con el fin de evitar robustecer la incidencia delictiva en la capital del país.
“De un universo de 194 mil 479 carpetas de investigación iniciadas por diversos delitos, en el periodo comprendido de enero a noviembre de 2018, la Dirección de Política y Estadística Criminal realizó el análisis de 42 mil 524 indagatorias, de las cuales 29 mil 82 fueron clasificadas con la etiqueta de delitos de bajo impacto para demostrar una falsa reducción en los índices delictivos”, acusó la funcionaria capitalina.
De acuerdo con Godoy Ramos, en la pasada administración tenían como límite asentar un aproximado de 620 delitos de alto impacto semanales y si habían más los cambiaban.
“Además se hacían informes mensuales pero también en estos se hacían ajustes, de acuerdo al tipo de delitos”, dijo.
En materia de homicidios fueron revisadas mil 227 carpetas de investigación en la Fiscalía competente, de las cuales 82 corresponden a homicidio doloso y fueron identificadas con inconsistencias, ya que fueron asentadas bajo la categoría de delitos de bajo impacto, como pérdida de la vida por causas naturales o fortuitas, entre otras.
Por el delito de robo de vehículo, expuso, la Fiscalía especializada cuenta con una estadística de 14 mil 349 carpetas de investigación, de las cuales 3 mil 946 resultaron registradas bajo otro tipo de crimen, como robo de objetos, de placas, de autopartes e incluso como otros hurtos ocurridos en el Estado de México.
Entre otras omisiones, expresó Godoy Ramos, se encuentran mil 314 delitos cometidos por personas menores de edad que no fueron contabilizados bajo la clasificación de alto impacto, aún y cuando existe una Fiscalía especializada para atender los hechos que recaen en actos de dicha naturaleza.
Según registros de la PGJ, un total de 18 mil 723 carpetas de investigación fueron iniciadas por el ilícito de robo de celulares con y sin violencia, sin embargo, estas también fueron catalogadas como delitos de bajo impacto, por lo que tampoco incidieron en las cifras reales.
Actualmente, manifestó la procuradora, a este delito se le está dando un seguimiento puntual ya que se trata de un ilícito que lastima mucho a la gente que utiliza el transporte público o suele transitar por la calle.
Van por sanciones
La titular de la Procuraduría capitalina advirtió que a la brevedad se presentará una denuncia ante la Fiscalía para la Investigación de los Delitos Cometidos por Servidores Públicos por la manipulación de datos para reducir los delitos de alto impacto.
El extitular de la Dirección General de Política y Estadística Criminal, César Martínez Jasso, sería la principal persona señalada por tales alteraciones, ya que su área estaba a cargo de clasificar los delitos en las categorías de alto y bajo impacto.
De acuerdo con información de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) local, el pasado mes de enero fue el más violento del que se tiene registro en los últimos cuatros años, ya que en el referido periodo un total de 143 carpetas de investigación fueron abiertas por el delito de homicidio doloso, lo cual representa un aumento cercano al 80 por ciento registrado en años anteriores.
Violencia al límite
Algunos de los delitos graves que llegan a ocurrir en la Ciudad de México están emparentados con la presencia de grupos del crimen organizado, dedicados principalmente al mercado de las drogas, asegura Santiago Roel, presidente de la organización Semáforo Delictivo.
“Lo que se observa en la capital del país es un incremento importante de hechos violentos relacionados con la operación de células del crimen organizado, sobre todo en temas de homicidios, control de territorios y ajuste de cuentas. La capital no había enfrentado estos fenómenos, pero los mismos se dan de manera idéntica, aunque en mucho menor medida que en algunas otras entidades del país”, sostiene.
El minimizar un problema de violencia en cualquier sitio implica una negativa, por lo que es necesario que se evalúen las condiciones y los tratamientos para tomar mejores decisiones desde el ámbito y no solo una respuesta posterior a los hechos, sino sobre todo en temas de prevención de los mismos.
La despenalización de las drogas coadyuvaría a disminuir los indices delictivos en México, incluyendo su capital, ya que cualquier policía está para el cuidado de la ciudadanía en general y no para contener las luchas territoriales entre los grupos delictivos, expone.
Delitos manipulados
Las querellas mal clasificadas o bien la omisión de tales registros están relacionadas principalmente con cuatro crímenes
- Homicidio
- Robo de vehículo
- Delitos cometidos por menores de edad
- Robo de teléfonos celulares