Los delegados de Programas de Desarrollo, quienes representarán al presidente de la República en los estados, fungirán como responsables civiles de coordinar el trabajo de las fuerzas federales dentro de la estrategia de seguridad.
Estos coordinadores estatales serán portadores de la voz del Ejecutivo federal para las acciones que se tomen contra la violencia
A decir de Alfonso Durazo, nominado como próximo secretario de Seguridad Pública, los participantes en las mesas de seguridad de los estados estarán bajo el mando de este representante civil.
En los próximos días el presidente electo y su equipo presentarán su estrategia de seguridad pública y pacificación del país
Estos delegados estatales tendrán a su cargo la aplicación de los recursos para los programas federales, además de coordinar acciones “en materias prioritarias”, entre las que pueden encontrarse las tareas de seguridad.
La creación de esta figura de los llamados “súperdelegados” causó el rechazo de varios gobernadores, quienes acusaron que su presencia en las entidades implicaría un segundo poder Ejecutivo estatal.
Apenas días después de haber ganado la elección del 1 de julio, Andrés Manuel López Obrador nombró a quienes serán los 32 delegados estatales de Programas de Desarrollo.
Se trata de políticos cercanos a su círculo de confianza y, en algunos casos, de excandidatos que compitieron por Morena para la gubernatura u otros cargos de relevancia en esas entidades, pero que perdieron la elección.
Este sábado, Alfonso Durazo y otros miembros del gabinete del gobierno electo se reunirán con los 32 delegados, para delinear cuáles serán las tareas que les corresponderán en materia de seguridad.
En los próximos días el presidente electo y su equipo presenten su estrategia de seguridad pública y pacificación del país.
Coordinarán también seguridad
Los delegados de Programas de Desarrollo no solo estarán a cargo del manejo de recursos federales en los estados.
Alfonso Durazo sostuvo que su papel en la estrategia de seguridad será fundamental, pues desempeñarán el mando civil en las mesas de estrategia que se instalen en cada estado.
“(El de los delegados) va a ser un rol importante, toda vez que ellos van a ser los representantes personales del presidente de la República en cada uno de los estados y, como tales, serán los responsables civiles de coordinar el trabajo de las fuerzas federales en cada una de las entidades o, según corresponda, en cada una de las regiones”, expuso Durazo en entrevista.
Aunque no ha sido dado a conocer el programa de seguridad y pacificación, Andrés Manuel López Obrador ha adelantado que se dividirá el territorio nacional en 265 coordinaciones regionales, donde se integrarán todas las fuerzas de seguridad bajo un mando único.
Los delegados no serán ese mando único, pero sí supervisarán las labores que las fuerzas de seguridad realicen en las regiones que les correspondan.
Alfonso Durazo negó que la presencia y labor de los delegados vaya a provocar un choque con los mandos militares que se encuentren operando en los estados.
“Invariablemente el poder militar está subordinado al poder civil y, en todo caso, el apoyo de los militares es como coadyuvantes de la autoridad civil. Y eso es lo que va a suceder en cada uno de los estados y en cada una de las regiones”, expuso Durazo, cuestionado sobre si no habría un conflicto de autoridad con la presencia de los delegados federales
Y no solo estarán a cargo de lo que realicen estas fuerzas de seguridad, sino también deberán poner atención en los programas de prevención que se diseñen para su entidad o su región, lo que les dará una visión integral de la pacificación.
La voz de AMLO
La creación de la figura de los delegados de Programas de Desarrollo ya está en marcha con las reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, presentada ya por la bancada de Morena en la Cámara de Diputados.
En dicha propuesta no se especifica si los delegados estarán a cargo de labores de seguridad, aunque su campo de acción es muy amplio según la iniciativa.
“El titular del Poder Ejecutivo federal contará en las entidades federativas con las Delegaciones de Programas para el Desarrollo que tendrán a su cargo la coordinación de acciones, en materias prioritarias, con las autoridades estatales, municipales y de la Ciudad de México, así como coadyuvar en la supervisión de los servicios y trámites de los programas prioritarios a cargo de las dependencias y entidades de la administración pública federal”, expone la iniciativa presentada por Mario Delgado el 18 de octubre pasado.
Los titulares de estas delegaciones permanecerán bajo la supervisión de Gabriel García Hernández, quien ha sido nombrado coordinador de delegaciones estatales. Jerárquica y funcionalmente dependerán de la Oficina de la Presidencia de la República, que será ocupada por Alfonso Romo.
Alfonso Durazo y otros miembros del gobierno electo se reunirán mañana con los 32 coordinadores para definir sus tareas en materia de seguridad
Los 32 delegados estatales de López Obrador serán Aldo Ruíz Sánchez, en Aguascalientes; Jaime Bonilla Valdez, en Baja California; Víctor Manuel Castro Cosío, en Baja California Sur; Katia Meare Ferniza, en Campeche; José Antonio Aguilar Castillejos, en Chiapas; Juan Carlos Loera de la Rosa, en Chihuahua; y María Cristina Cruz Cruz, en la Ciudad de México.
También Reyes Flores Hurtado, en Coahuila; Indira Vizcaíno Silva, en Colima; Enrique Novelo Solís, en Durango; Mauricio Hernández Núñez, en Guanajuato; Pablo Amílcar Sandoval, en Guerrero; Abraham Mendoza Zenteno, en Hidalgo.
Así como Carlos Lomelí Bolaños, en Jalisco; Delfina Gómez Álvarez, en el Estado de México; Roberto Pantoja Arzola, en Michoacán; Hugo Eric Flores, en Morelos; Manuel Peraza, en Nayarit; Blanca Judith Díaz Delgado, en Nuevo León; Nancy Ortiz Cabrera, en Oaxaca; Rodrigo Abdalá D’Artigues, en Puebla; y Gilberto Herrera Ruiz, en Querétaro.
Estarán también Arturo Abreu Marín, en Quintana Roo; Gabino Morales Mendoza, en San Luis Potosí; Jaime Montes Salas, en Sinaloa; Jorge Taddei Bringas, en Sonora; Carlos Merino Campos, en Tabasco; José Ramón Gómez Leal, en Tamaulipas; Lorena Cuéllar Cisneros, en Tlaxcala; Manuel Huerta Ladrón de Guevara, en Veracruz; Joaquín Díaz Mena, en Yucatán; y Verónica Díaz Robles, en Zacatecas.
