David Olivo Guzmán toma la dirección de Agua y Drenaje de Monterrey en ausencia de Barragán

Juan Ignacio Barragán, director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, estará ausente de su puesto por 12 días, dejando como encargado del despacho al abogado David Olivo Guzmán, quien no posee experiencia en temas hídricos.

Apenas el pasado viernes, los empleados de esta dirección fueron notificados que Olivo Guzmán tomaría el mando de Agua y Drenaje de Monterrey y asumiría la “alta dirección como encargado del despacho”, durante el periodo comprendido entre el 14 y el 26 de octubre.

En el documento se señala que, como encargado, David Olivo tendrá facultades y atribuciones inherentes al despacho, así como todas las obligaciones que señalen las leyes, reglamentos, acuerdos y cualquier otra disposición vigente en el estado.

También se solicita a todos los trabajadores que dirijan a Olivo Guzman los asuntos que requieran intervención de la dirección, sin mencionar en ningún momento que Barragán se encontrará ausente.

El artículo 30, capítulo VI, del Reglamento Interior de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, que habla de “suplencias de personas titulares”, establece la necesidad de designar a un encargado de despacho.

De acuerdo con este ordenamiento, las ausencias del director por más de 15 días naturales serán suplidas por una persona designada por el titular del Poder Ejecutivo.

“En caso de ser menor el periodo de ausencia, la persona titular de la Dirección General dejará como encargado o encargada del despacho a la persona servidora pública que en forma expresa designe”, dice este artículo.

La decisión de Barragán de nombrar como encargado de despacho a Olivo Guzmán, quien no cuenta con experiencia en temas referentes a agua, manifiesta un probable desprecio hacia Mario Esparza, subdirector adjunto de Servicios de Agua y Drenaje, quien cuenta con una amplia experiencia hídrica.

Esparza fue uno de los principales impulsores de la implementación del Sistema de regulación de presiones de la red de agua potable de la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM), con lo que se logró una mejor distribución del líquido durante el desabasto vivido recientemente en la entidad.

Por su parte, Barragán tomó el cargo de este órgano local en octubre de 2021, por lo que estuvo desde la transición de administraciones. Un mes después, negó que habría recortes de agua para la ciudadanía, pese a que tres presas presentaban un bajo nivel de almacenamiento.

Para junio de 2022, el funcionario anunció que sí habría recortes al servicio, por lo que comenzaron a cerrar las válvulas de la red de agua potable, situación que ocasionó que el ducto que va de la Presa El Cuchillo a la ZMM no soportara la presión y tronara, hecho que dejó sin agua a la mitad de la población.

La distribución del agua de manera deficiente ocasionó que el abasto no fuera equitativo, hasta el momento en el que Esparza implementó la regulación de presiones, logrando así estabilizar el servicio para la ciudadanía.

A Barragán después de dejar a David Olivo Guzmán lo espera la glosa

Al regresar de sus vacaciones, el director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, Juan Ignacio Barrágán, tendrá que presentarse ante diputados del Congreso local para explicar su gestión de la crisis de agua en Nuevo León.

Será el próximo 9 de noviembre cuando el funcionario responderá a los cuestionamientos de los legisladores acerca del desabasto de líquido en la entidad, y la razón de los recortes inequitativos que sufrieron los ciudadanos.

Durante esta comparecencia, programada para las 10:00 horas de la fecha señalada, solo se tocarán temas relacionados con el desabasto que sufrió la entidad recientemente.

El diputado de Morena Waldo Fernández considera que la crisis de agua aún no termina, y que la instalación de un segundo acueducto de la presa El Cuchillo a la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM) no resolverá el problema en su totalidad.

“En el tema del agua se frivolizó el problema, se mintió una y otra vez hasta que se tuvo que aceptar una realidad: que si abrías una llave no había agua. No es una solución definitiva, porque prácticamente lo que estamos haciendo con El Cuchillo es meterle un popote más al mismo vaso de agua.

“No hay nuevas fuentes de agua y eso es algo que se tiene que trabajar”, aseveró Fernández.

Otro tema sobre el cual Barragán tendrá que dar explicaciones es cómo quedará Nuevo León por el trasvase de agua que se tiene que cumplir con Tamaulipas, asunto sobre el que no se ha informado con certeza.

La Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM) requiere en promedio 16 mil 564 litros de agua por segundo, por lo que se necesita infraestructura para habilitar nuevas fuentes de abastecimiento. Hasta antes de la crisis, 60 por ciento del abasto provenía de las presas y el 40 por ciento restante de fuentes subterráneas.

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