La obra del acueducto Cuchillo II, que dotará de 5 mil litros de agua por segundo a la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM), inició sin los estudios técnico-científicos necesarios para determinar cuál será el impacto ambiental de la construcción.
Se trata de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) y el Estudio Técnico Justificado (ETJ), que son indispensables para que esta obra no provoque daños ecológicos, fragmentación de los ecosistemas ni afectaciones al medio ambiente.
Además, estos estudios indican cuáles son las medidas preventivas necesarias para minimizar los efectos negativos producidos por la ejecución de obras y permiten evaluar la factibilidad ambiental para la ejecución de proyectos de inversión industrial, de infraestructura, manufactura, comercios o servicios.
El Acueducto El Cuchillo II, ambicioso proyecto de más de 100 kilómetros de conducción de agua en tubería 2 metros de diámetro, es ejecutada por un grupo de empresas en donde @CIPRO_MX asegura que el suministro de los materiales dentro de parámetros de calidad del proyecto. pic.twitter.com/QXCG1qvzis
— CIPRO (@CIPRO_MX) February 10, 2023
Documentos en poder de Reporte Índigo revelan que la Comisión Nacional del Agua (Conagua), promovente del proyecto, contrató a AMCO Soluciones Jurídicas Ambientales, empresa responsable de los trámites ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
“La Comisión Nacional del Agua, sometió el procedimiento de evaluación en materia de impacto ambiental a través de una MIA al proyecto denominado Construcción del Acueducto Cuchillo II para abastecimiento de agua a la Zona Metropolitana de Monterrey”, dice la Gaceta Ecológica.
Fue hasta el pasado 9 de diciembre que se solicitó la MIA para la construcción del acueducto Cuchillo II, por lo que se publicó a destiempo en la Gaceta Ecológica del Gobierno federal ya que las obras del ducto, que tendrá una extensión de 107 kilómetros, arrancaron el pasado 3 de septiembre con la presencia del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, y el gobernador de Nuevo León, Samuel García.
La empresa responsable
El documento de Manifestación de Impacto Ambiental señala en su página 25 que el responsable de los trámites ambientales, y en este caso del retraso, sería AMCO Soluciones Jurídicas Ambientales.
“(La) Empresa responsable de los trámites ambientales: MIA y ETJ. Razón Social: AMCO Soluciones Jurídicas Ambientales (Se anexa copia del alta de proveedor)”, dice la MIA.
La Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA), establece que las obras hídricas tendrán que ser sometidas a una evaluación de impacto ambiental en la zona del proyecto.
“Quienes pretendan llevar a cabo alguna de las siguientes obras o actividades, requerirán previamente la autorización en materia de impacto ambiental de la Secretaría. Obras hidráulicas, vías generales de comunicación, oleoductos, gasoductos, carboductos y poliductos”, dice el artículo 28 de esta Ley.
Por otra parte, el artículo 30 de dicha legislación señala que para la autorización de la construcción del Cuchillo II, los interesados tendrán que presentar a la Semarnat la manifestación de impacto ambiental que, por lo menos debe contener algunos posibles efectos a los ecosistemas de la región.
“Que pudieran ser afectados por la obra o actividad de que se trate, considerando el conjunto de los elementos que conforman dichos ecosistemas, así como las medidas preventivas, de mitigación y las demás necesarias para evitar y reducir al mínimo los efectos negativos sobre el ambiente”, dice este artículo.
Y aunque en esta ley abre la puerta a que pudiera solo presentarse un informe preventivo, la Semarnat valorará si es necesario hacer el estudio de manifestación de impacto ambiental, lo cual no ocurrió, pues la Conagua solicitó a destiempo hacer este análisis técnico-científico.
Gastará mucha luz
La puesta en marcha del acueducto Cuchillo II para que lleguen 5 mil litros por segundo de agua a la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM) dependerá totalmente de la energía eléctrica para que llegue el líquido.
El acueducto utilizará una red de subtransmisión eléctrica para un total de cinco estaciones de bombeo equipadas cada una con 6 conjuntos de motor y bomba, además de una estación de bombeo auxiliar, así como su edificio.
La obra requiere un sistema de control PLC con fibra óptica para automatización del abastecimiento de agua que genera para su funcionamiento mucha energía. No obstante, para que se pueda obtener esta agua, se tiene que ampliar la planta potabilizadora de San Roque, pues su operación no podría soportar más agua adicional.
El director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, Juan Ignacio Barragán Villareal, se comprometió a que a partir de este verano, en junio, se comenzará a extraer agua de la presa del Cuchillo, pero debido a lo complejo de las obras es muy poco probable que se logre.
