CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Alrededor de la tercera parte de los mexicanos podrían haber estado expuestos al coronavirus hacia finales de 2020, de acuerdo con un estudio aleatorio de muestras sanguíneas realizado entre febrero y diciembre de 2020.
Se encontraron anticuerpos en 33.5 por ciento de las muestras en bancos de sangre y exámenes de laboratorios médicos de México. Los niveles varían según las regiones: La mayor tasa de exposición se encontró en el noroeste, desde Baja California hasta Chihuahua, con un 40.7 por ciento. La más baja fue en el occidente del país con 26.6 por ciento. En general, las zonas a lo largo de la frontera con Estados Unidos tuvieron un mayor índice.
“Necesitaríamos al menos el 75 por ciento, eso lo podemos alcanzar con la vacunación”, indicó Borja.
Las autoridades han insinuado que con casi 350 mil decesos relacionados con el virus, y alrededor de 40 millones de mexicanos expuestos, la tasa de mortalidad podría ubicarse por debajo del 1 por ciento.
Además, el estudio dejó entrever que alrededor del 86 por ciento de los infectados habían desarrollado anticuerpos efectivos, pero el 14 por ciento no lo hizo y podría infectarse de nuevo.
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Las autoridades mexicanas también anunciaron la detección de tres casos de la variante sudafricana del virus el martes. Anteriormente ya se habían detectado infecciones con la variante británica y la brasileña en el país, pero México realiza relativamente pocas pruebas de diagnóstico.
El país ha recibido alrededor de 22.6 millones de dosis de vacunas y administrado alrededor de 17 millones, que abarcan a unas 12 millones de personas, algunas de las cuales ya recibieron dos dosis. Eso sigue siendo una cifra muy baja para un país de 126 millones de habitantes. México ha vacunado a muchos de sus residentes mayores de 60 años y planea empezar a vacunar a las personas de entre 50 y 59 años a partir de mayo.
México registra más de 216 mil muertes por COVID-19 confirmadas mediante análisis, pero el país realiza tan pocas pruebas diagnósticas que muchas personas fallecen sin que se les practique una.
Una revisión preliminar del gobierno a las actas de defunción deja entrever que el número de muertes excedentes atribuibles a COVID-19 llegó a 316 mil 344 a principios de marzo. Desde entonces se han confirmado 29 mil 395 defunciones por la enfermedad, para un total de 346 mil 110.