El tratamiento de enfermedades relacionadas con el tabaquismo consume miles de millones de pesos de cada año.
Tan solo en 2017, el gasto público se calculó en 81 mil 132 millones de pesos, lo que representa el 2.8 por ciento de los ingresos tributarios y el 58.3 por ciento de los ingresos percibidos por el cobro del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) no petrolero.
Un análisis del Centro de Estudios de Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados revela que en México se calcula que el tabaquismo es causante de entre 25 mil y 60 mil muertes cada año.
Además, casi 11 millones de mexicanos que nunca han fumado también están expuestos al tabaco de segunda mano; el sistema público de salud también ha invertido 9 mil 521 millones de pesos para atender a estos fumadores pasivos.
Este 31 de mayo se conmemora el Día Mundial sin Tabaco; según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo de tabaco provocó el año pasado la muerte de más de 7 millones de personas en todo el mundo.
En su estudio “El Tabaquismo y su efecto en las Finanzas Públicas: 2007-2017”, el CEFP menciona que en México el inicio promedio del consumo de tabaco es a los 19 años; y de los individuos entre 12 y 65 años, los fumadores representan el 17.5 por ciento, donde de este total 74.5 por ciento son hombres y 25.5 por ciento mujeres.
Del total de los fumadores, 78.3 por ciento declaró tener interés en dejar de fumar y 48.1 por ciento realizó la compra por unidad (cigarros sueltos); esta proporción aumenta a 75.7 por ciento entre los fumadores de 12 a 17 años, según cifras de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco 2016-2017.
El consumo de tabaco no ha logrado disminuirse en el país a pesar de que en los últimos años se ha aumentado el cobro de impuestos.
El CEFP señala que por cada una de las 2 mil 451 millones de cajetillas de cigarros que se vendieron en México en el 2017, el Estado cobró 16 pesos de impuestos.
Esta cantidad es 78 por ciento mayor a lo que se cobraba en 2007, cuando el impuesto recaudado era de 9 pesos.
De acuerdo con cifras del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), el área total cultivada de tabaco en 2017 fue de 6 mil 974 hectáreas, el 0.19 por ciento del total.
En 2017, la industria del tabaco empleó a 2 mil 185 personas, lo que representa el 0.06 por ciento del total de empleos del sector manufacturero en todo el país.
Por ello, el CEFP hace un llamado a evaluar si los impuestos cobrados por el consumo del tabaco son suficientes para tratar sus consecuencias.
“Solo el 45.4 por ciento del gasto en salud asociado al tabaquismo tiene una contraparte en los ingresos por IEPS; por lo anterior, y dados los problemas de salud pública atribuibles a este producto, sería importante revisar si la estructura impositiva vigente es una estrategia suficiente para reducir su consumo y en consecuencia, si con ellas se combate las implicaciones asociadas al mismo”, sostiene el Centro de Estudios.
El aumento en el precio del tabaco está directamente relacionado con el aumento en el cobro de los impuestos; pero esto no ha servido para disminuir el consumo y sus consecuencias.
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