Actualmente la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) enfrenta la peor crisis hídrica de la que se tiene registro. La sequía generalizada en el país y la mala gestión de recursos tienen al Sistema Cutzamala en colapso y sin poder aumentar su capacidad a consecuencia de la ausencia de lluvias.
En su último informe, la Comisión Nacional del Agua (Conagua), durante la última semana el nivel de llenado conjunto de las tres presas de almacenamiento que conforman al Cutzamala no hizo más que disminuir.
Según la dependencia, las presas El Bosque, Valle de Bravo y Villa Victoria, que suministran el 25 por ciento del abasto de la ZMVM, disminuyeron del 40.1 por ciento de su capacidad, reportada el martes anterior, al 39.8 por ciento. Esto representa un déficit de 37 por ciento en comparación al dato histórico del 29 de enero.
#Comunicado#Conagua mantiene operativos emergentes y de apoyo para reforzar servicios de #Agua.
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— Conagua (@conagua_mx) January 29, 2024
Sistema Cutzamala en mínimos históricos
En este contexto, la directora general del Organismo de Cuenca y Aguas del Valle de México (OCAVM) de Conagua, Citlalli Elizabeth Peraza Camacho, enfatizó en conferencia de prensa que el volumen total de las tres presas se ubica en 311.5 millones de metros cúbicos.
De esta manera informó que el almacenamiento de El Bosque se redujo de 60.6 a 60.2 por ciento; el de Villa Victoria incrementó de 30.1 a 30.2 por ciento y, finalmente, el de Valle de Bravo pasó de 34.4 a 33.9 por ciento.
Dado este escenario, el OCAVM sostiene que la fecha en la que ya no se podrá operar y el sistema colapsaría sería el 26 de junio. La recuperación comenzaría hasta el mes de septiembre. Se trata de un concepto denominado “día cero”.
El día cero representa una situación de estrés hídrico extremo a consecuencia de una combinación de diversos factores. Entre ellos destaca el aumento en la demanda del agua, la gestión ineficiente de recursos, la sequía y la crisis climática.
Además, según estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), si en la Ciudad de México no se implementan medidas urgentes para mejorar la captación y repartición de recursos, el día cero definitivo llegaría en 2028.
