Crisis por COVID-19 deja sin ingresos a 11.3 millones de mexicanos

La crisis causada por el COVID-19 llevó a 11.3 millones de mexicanos a quedarse sin ingresos debido al cierre de negocios, restricciones de sueldo y despidos por la cuarentena
Indigo Staff Indigo Staff Publicado el
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Debido a la crisis causada por la pandemia de COVID-19, que llevó a una larga cuarentena, 11.3 millones de mexicanos se quedaron sin ingresos, según informa el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

En abril, al inicio del periodo de cuarentena, 20 millones de mexicanos estaban disponibles para trabajar.

No todas las personas que perdieron su ingreso fijo se quedaron sin empleo, algunos sólo son parte de una suspensión temporal de salarios.

“Es importante subrayar que se trata de una suspensión sin percepción de ingresos de por medio y sin certeza de si se mantiene el vínculo laboral o de retorno al trabajo”, puntualizó el INEGI.

La Población Económicamente Activa (PEA) es de 45.4 millones de personas, hasta abril, según datos obtenidos con la Primera Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo (ETOE), del INEGI.

Desde marzo, en el que se registraba una PEA de 57 millones, se presentó un decremento de 12 millones de personas en este rubro, el cual pasó a formar parte de la Población No Económicamente Activa(PNEA), la cual alcanzó un total de 50.2 millones.

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Durante la última semana de marzo, cuando las restricciones en torno al COVID-19 comenzaron a endurecerse, 9.1 millones de mexicanos se quedaron sin empleo.

Entre las razones de pérdida de empleo se encuentran; despido, renuncia, o cierre de negocios.

Mientras 5.8 millones perdieron su trabajo antes de marzo y 3.5 millones perdieron su fuente de empleo en abril, mientras 1.7 millones dijeron no haber trabajado nunca antes de que estallara la pandemia.

Según la encuesta telefónica del INEGI 43.3 millones de personas dijeron estar laborando actualmente.

El descenso en la PEA de 12.5 millones concuerda con el dato de personas que dejaron de colocarse en el sector laboral.

De acuerdo a los datos recabados por el INEGI, la población que pasó de la ocupación a la no disponibilidad, se dirigió al grupo de personas que se mostraban dispuestas a trabajr. Tras este cálculo el dato se elevó en 14.1 millones de personas, desde los 5.9 millones en marzo, hasta 20 millones en abril.

Estas 20 millones de personas desocupadas actualmente expresaron al INEGI su intención de volver a trabajar tras acabar la epidemia.

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