Crisis migratoria: INM enfrenta transición sin contratos para 2025 y caravanas al norte

El Instituto Nacional de Migración (INM), encargado de atender a los connacionales que migraron hacia Estados Unidos o Canadá, así como a las caravanas procedentes de otros países, inició un periodo de reestructura.

Este viernes 27 la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aclaró que aun cuando Sergio Salomón Céspedes concluyó su gobierno en Puebla, aún no hay fecha para que asuma de manera oficial como comisionado del INM pues el organismo requiere “modificaciones importantes”.

Los cambios en el organismo fueron anunciados mientras Francisco Garduño Yáñez, su comisionado hasta ahora, debe firmar de manera periódica en un juzgado por el proceso penal que se le sigue por su presunta responsabilidad en el incendio donde murieron 40 migrantes en marzo de 2023 en una estación migratoria en Ciudad Juárez, Chihuahua.

Esta noche, cuando se recibirá a un nuevo año y hay cinco caravanas rumbo al norte que tienen el intento de llegar a Estados Unidos, 55 contratos del organismo con varios proveedores vencerán. Después, en el primer minuto de 2025, el INM no tendrá ninguna contratación pública vigente para atender a quienes continúen de paso o regresen al no haber logrado ingresar al país del norte.

Los contratos en sus últimas horas suman 2 mil 30 millones 304 mil 838 pesos. El mayor, por 496 millones 551 mil 724 pesos, es para el servicio de transportación vía terrestre para personas en situación de deportación. El segundo en monto, por 387 millones 931 mil 34 pesos, es para alimentación de migrantes. El tercero, por 152 millones 956 mil 638 pesos, es para el Centro de Datos del Instituto.

Lo anterior, de acuerdo con una localización de contratos de Reporte Índigo en CompraNet y la Plataforma Nacional de Transparencia. Para el año que está por iniciarse no hay ningún contrato público relacionado con la migración, el asunto que el próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha puesto como prioritario en la relación con México.

Diciembre de 2024: las estancias migratorias

Obligado por su propio marco jurídico a “proteger” a las personas extranjeras “aseguradas” en territorio mexicano, el INM adecuó de manera provisional en todo el país cientos de inmuebles como estancias provisionales en las últimas décadas. No se trata de albergues ni de oficinas. Son espacios con celdas y cerrojos.

Fue en una estancia como esa, en Ciudad Juárez, Chihuahua, donde un incendio mató a 40 migrantes, lo que recrudeció la crisis migratoria y colmó las historias de fracaso de millones de personas en su intento por llegar a Estados Unidos a través del territorio mexicano.

De los 55 contratos por vencer este 31 de diciembre, seis son para estos sitios en todo el país. Son para comida, adquisición de cobertores, agua purificada en garrafones, medicamentos y material de curación, así como alimentación.

Se trata de contrataciones que fueron firmadas en mayo de este año cuando en el INM se vivían los últimos meses de la gestión de Francisco Garduño Yáñez.

Se inicia la cuenta regresiva para la toma de posesión de Trump

En diciembre del año pasado, el número de migrantes que se quedaron en México después de ser detenidos en la frontera entre México y Estados Unidos fue de 301 mil 981, una cifra que no se había registrado desde marzo de 2000, según datos de la Patrulla Fronteriza.

Ahora, hay otro escenario. El 20 de enero del año entrante Donald Trump tomará posesión como presidente de Estados Unidos y su promesa principal de campaña fue “no dejar pasar más migrantes”.

Datos de la Secretaría de Relaciones Exteriores indican que una vez que Trump asuma como primer mandatario, unos 11 millones de personas, entre mexicanos que retornen y extranjeros que no logren cruzar, pueden quedar en una situación irregular en México.