Crisis de agua en México: ¿Qué estados son los más afectados por escasez de agua en sus presas?

Una sequía generalizada en México, así como un mal manejo de recursos, provocan que algunos estados enfrenten escasez de agua
José Andrés Velázquez José Andrés Velázquez Publicado el
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México enfrenta una crisis hídrica como consecuencia de una sequía generalizada. Este hecho responde a diversos factores, como un mal manejo del recurso, fugas y el propio calentamiento global derivado de la acción humana.

De hecho, diversas autoridades de la materia alertan sobre la posibilidad de que el “día cero” llegue a la Ciudad de México en las próximas semanas. Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua) es cuestión de tiempo para que el Sistema Cutzamala colapse.

Al mismo tiempo, otros estados de la república enfrentan niveles críticos en sus propias presas. Esto deriva en una preocupación generalizada con respecto al desabasto de agua.

¿Cómo afecta la sequía a diversos estados en México?

El monitoreo de las principales presas de México de Conagua, actualmente al menos cuatro de estos sistemas de almacenamiento están completamente secos.

Las presas que en este momento están en un cero por ciento de su almacenamiento son Divino Redentor y La Venta, en Querétaro; así como Hermosillo y Punta de Agua, en Sonora.

Por su parte, otras 22 presas se encuentran en un nivel menor al 10 por ciento de su capacidad. De hecho, sólo 87 de 208 presas se encuentran por encima del 50 por ciento. El resto opera con niveles menores. En algunos casos, incluso críticos.

En este contexto, las entidades que se encuentran debajo de la mitad de su capacidad total son las siguentes:

  • Tlaxcala
  • Estado de México
  • Puebla
  • Michoacán
  • Morelos
  • Guanajuato
  • Colima
  • Sonora
  • Chihuahua
  • Baja California
  • Nuevo León
  • Durango
  • Sinaloa
  • Zacatecas
  • San Luis Potosí
  • Veracruz
  • Aguascalientes
  • Tamaulipas
  • Coahuila

¿Qué es el día cero?

El “Día Cero” es el momento en que una ciudad o región se queda sin agua potable. Es un escenario aterrador, pero que cada vez es más real debido al cambio climático, la sobreexplotación de los acuíferos y la contaminación del agua.

En términos prácticos, significa que:

  • No habrá agua disponible para beber, cocinar o asearse.
  • Los hospitales, escuelas y negocios tendrán que cerrar.
  • Se podría desatar una crisis sanitaria.
  • La gente tendrá que buscar agua en otras ciudades o regiones.
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