La semana pasada, el estado vivió una jornada violenta con ejecuciones en Escobedo, Santa Catarina, Juárez
y un intento de ejecución en la colonia del Valle, en San Pedro
“Las luchas internas por el poder y el desorden sufrido por los del Cártel del Golfo y Los Zetas son también propensos, contribuyendo a la expansión del CJNG”
“En Tamaulipas hay lugares despoblados y ciudades chicas donde se puede ubicar al objetivo, pero en Monterrey y su zona metropolitana pueden pasar desapercibidos sin ningún problema”
Nuevo León se ha convertido en un territorio codiciado por los cárteles de la droga, que han generado en la última semana una violencia por la disputa de la “plaza”.
Considerado como una zona estratégica para el trasiego de droga a Estados Unidos, por sus brechas y caminos clandestinos, hoy en día Nuevo León está bajo acecho de la delincuencia organizada.
En la entidad confluyen los intereses del Cártel Jalisco Nueva Generación, Cártel del Golfo, Cártel de Los Zetas y sus células delictivas, el Cártel del Noreste, Los Beltrán Leyva y Cártel de Sinaloa.
“Esto apenas empieza”, señala un mensaje clavado con un picahielo en una bolsa con restos humanos encontrado en el municipio de Escobedo.
Aunque el mensaje no era firmado por una organización criminal, iba dirigido a miembros del Cártel del Golfo y Zetas, quienes históricamente están enfrascados en una guerra por la disputa de la plaza de Nuevo León.
Todo apunta a que una nueva organización entró a este estado en busca de arrebatarle a las organizaciones de los zetas y golfos el control de operaciones y venta de droga al menudeo.
Esto fue advertido por la Administración de Control de Drogas (DEA). En 2015, la DEA señaló la presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación en Nuevo León. Dos años después pareciera que esto se hizo realidad.
En una evaluación realizada por la DEA en poder de Reporte Indigo se asegura que en medio de las pugnas internas por el poder y desorden del Cártel del Golfo y Los Zetas, éstos pueden sufrir un “agandalle” de su territorio en Nuevo León y Tamaulipas.
“Las luchas internas por el poder y el desorden sufrido por los del Cártel del Golfo y Los Zetas son también propensos, contribuyendo a la expansión del CJNG. El CJNG se encuentra en una posición privilegiada para aumentar sus operaciones de tráfico de drogas”, señala el documento de la DEA.
El alcalde de San Pedro Garza García, Mauricio Fernández Garza, advirtió el año pasado que existen por lo menos seis cárteles operando en Nuevo León.
“Hay nuevos cárteles que se están formando y algunos de ellos con presencia en Nuevo León que antes no existían; entonces, es un tema nada sencillo, es un reacomodo de organizaciones criminales que vamos a vivir por un tiempo aquí”, aseguró el edil el pasado 6 de enero de 2016.
‘Refuerzo’ desde Reynosa
Tras la violencia desatada en Reynosa, Tamaulipas, recientemente el “efecto cucaracha” pareciera que alcanzó a Nuevo León.
La semana pasada el estado vivió una jornada violenta como en los peores días de su época oscura.
Se registraron dos ejecuciones en Escobedo, donde también cuatro personas fuera baleadas, un crimen más en Santa Catarina, una mujer asesinada en Juárez y un intento de ejecución en la colonia del Valle, en el municipio de San Pedro.
Esto tiene una explicación. Fuentes de inteligencia federal consultadas por Reporte Indigo revelaron que llegó a Nuevo León un nuevo jefe de plaza, por lo que advirtieron de más ajustes de cuentas en las próximas semanas.
“De antemano sabemos que ‘El Toro’ corre para Monterrey, sus empleados se quejan de que no paga y además pone el dedo”, asegura una fuente federal.
Agregó que las condiciones de la zona metropolitana complican las acciones de la Marina, Policía Federal y Ejército para ubicar a los cabecillas de las organizaciones, motivo por el cual se disputan el control operativo en Nuevo León.
“No es lo mismo operar en Tamaulipas que en Monterrey, acá en Tamaulipas hay lugares despoblados y ciudades chicas donde se puede ubicar al objetivo, pero en Monterrey y su zona metropolitana pueden pasar desapercibidos sin ningún problema”, dijo el informante.
Criticó la falta de coordinación entre el Estado y la Federación para formar un cerco de vigilancia, y así evitar la presencia de grupos armados.
Más efectivos
Desde hace 15 días, personal de la Marina y Policía Militar patrullan las principales avenidas y colonias del área metropolitana de esta entidad.
Se ha observado un incremento de pelotones de ambas fuerzas armadas; anteriormente era muy poca su presencia entre los regios.
Pero lo cierto es que cada vez existe una sensación de mayor inseguridad y los hechos violentos están a la orden del día.
Esto obligó al sector empresarial a solicitar al presidente Enrique Peña Nieto un mayor despliegue de militares, durante su visita a Nuevo León hace dos semanas.
Hasta el momento, el Gobierno independiente no ha salido a aclarar qué está sucediendo en este estado, pues el vocero de Seguridad, Aldo Fasci Zuazua, no ha dado un informe de la presencia de más cárteles.
