El virus SARS-CoV-2 se introdujo como un evento completamente nuevo y diferente a los ya estudiados al ser una enfermedad, modificando los esquemas y planes contemplados para enfrentar los desastres naturales, así como las herramientas previstas para actuar en cuestiones de protección civil.
De acuerdo con el estudio “Impacto Socioeconómico de los Principales Desastres Ocurridos en México 2020”, no se pueden comparar las afectaciones que el virus originario de China ha dejado a su paso con las del resto de los fenómenos naturales (terremotos, inundaciones, ciclones, etc), especialmente en cuanto al costo de vidas humanas, esto a pesar de que la pandemia por coronavirus entra en la misma clasificación que los anteriores.
“Dentro de la historia moderna de nuestro país el terremoto de 1985 ha sido el más catastrófico por la pérdida de vidas. El total de decesos para ese desastre fueron 6 mil, esto quiere decir que las defunciones por la COVID-19, que son 21 veces más ese número, terminarían por llevar a conclusiones no válidas en el análisis de la gobernanza de la Gestión del Riesgo de Desastre”.
“Además el número de muertes en 2020 tan sólo por coronavirus (125 mil 807) representan casi 12 veces el total de muertos en 20 años por desastres (10 mil 626). Es decir, del año 2000 al 2020, un total de 506 personas perdieron la vida al año en promedio en nuestro país a consecuencia de un desastre, esto quiere decir que únicamente por la pandemia, han muerto en un año casi 250 por ciento más personas”, explica el documento.
Por este motivo, el estudio realiza un análisis separado de los fenómenos naturales más dañinos para el país además del COVID-19 durante el 2020.
El número de muertes provocadas por el COVID-19 en México es 21 veces mayor a las que dejó el terremoto de 1985, el cual es clasificado como el evento más catastrófico de la historia moderna
Los desastres más catastróficos
Históricamente, los desastres de origen hidrometeorológico son los que provocan mayor destrucción en el país y el año pasado esto no fue la excepción, ya que ocuparon el primer puesto en viviendas, escuelas y unidades de salud dañadas, así como en el valor de los daños y las pérdidas.
Entre los principales acontecimientos registrados de origen hidrometeorológico se presentaron en el territorio nacional huracanes, tormentas tropicales, lluvias, inundaciones y sequías.
En total, la población afectada ascendió a 858 mil 735: de las cuales 839 mil 739 fueron víctimas de fenómenos hidrometeorológicos, 13 mil 554 de químicos, 3 mil 169 de geológicos, 2 mil 186 de socioorganizativos y 87 de sanitarios.
