La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) analizó la propuesta de Andrés Manuel López Obrador, Presidente electo de la República, respecto a eliminar a los delegados federales de cada dependencia e instituir coordinadores estatales del Gobierno federal seleccionados por el Ejecutivo, ya que aunque consideró que hay justificación para atender la situación, la medida no es garantía para combatir la corrupción.
Actualmente, cada secretaría federal tiene a un representante en los 32 estados del país, para que los ciudadanos acudan ahí para hacer algún trámite o gestión.
El nuevo gobierno de López Obrador pretende desaparecer estas delegaciones y dejar en su lugar a un coordinador estatal que representará al gobierno federal en su totalidad; los coordinadores estatales son personajes políticos cercanos a él.
Además, se pretende que los recursos federales sean ejercidos por estos representantes y no sean enviados a los gobiernos de los estados, como sucede ahora.
“La propuesta, tal cual se ha justificado, pretende concentrar las facultades y funciones de los numerosos delegados federales adscritos a una entidad federativa, en un solo funcionario, que tendría por ello múltiples y heterogéneas funciones administrativas y técnicas, y desde luego políticas”, señala la Coparmex en un comunicado, “de prosperar la iniciativa, cada Coordinador Estatal serviría de enlace entre el gobernador del estado y el gobierno federal, y de facto se convertiría en la autoridad rectora de la aplicación de recursos e implementación de los programas federales”.
En su mensaje, la Coparmex coincide en que existe la necesidad de mejorar la eficiencia y la transparencia del ejercicio de los recursos públicos-federales, y que la próxima administración enfrentará el desafío de prevenir y combatir la corrupción “vinculada a la aplicación indebida de los mismos por parte de varios gobiernos estatales”.
De esta manera, la Coparmex respaldó la eliminación de los delegados federales, y propuso que se analice la desaparición de muchas delegaciones “cuya existencia no se justifica, y cuyas tareas pueden realizarse a través de convenios de coordinación con los gobiernos locales”.
No obstante, la Coparmex alertó que la designación de los coordinadores estatales del Gobierno Federal no es garantía para atender la corrupción y “supondrá una involución en la solidez del sistema federal, debilitando los equilibrios y contrapesos en la relación de los gobiernos estatales y municipales con la Federación”.
“Es irrefutable que el país necesita de gobiernos locales y municipales fuertes, pues en esos órdenes de gobierno es donde pueden potenciarse las capacidades para identificar las necesidades de la población y contar con las mejores aptitudes para atenderlas a través de la tarea de gobierno”, indica la Coparmex, y precisó que en México se debe fortalecer la descentralización mediante el traslado ordenado de facultades de la Federación a los estados y municipios.
“La concentración del liderazgo de las tareas de más de veinte dependencias federales en una sola persona, supone una pérdida de especialidad y de pericia, lo cual podría traducirse en decisiones erráticas”, expone la Coparmex en su texto, e hizo especial mención en el tema de la seguridad, ya que puntualiza que el hecho de que los coordinadores sean los encargados de las acciones de seguridad emprendidas por el Gobierno Federal, “pondría en riesgo la cadena de mando en las autoridades militares y la eficacia del mando único del gobernador sobre las Fuerzas Armadas”.
Aunque la Coparmex adelantó que apoyará las decisiones del gobierno de López Obrador enfocadas a promover la eficiencia, el adelgazamiento del aparato gubernamental, el equilibrio presupuestario, y el combate a la corrupción, precisó que sus miembros consideran que las estrategias que se adopten para alcanzar los objetivos “deben analizarse cuidadosa y reflexivamente, en lo jurídico, en lo político, y sobre todo en su conveniencia y sustentabilidad administrativa en el largo plazo”.
La Coparmex consideró que con la propuesta de López Obrador se vulnera el federalismo, la pluralidad democrática, la soberanía de los estados y el fortalecimiento municipal.
“El voto le ha dado a la próxima administración federal el poder de transformar al país con una legitimidad democrática sin precedentes. El camino a seguir debe ser fortalecer el régimen republicano y el federalismo, y con ello, el poder transformador de la democracia”, concluyó la Coparmex.
