Han pasado ya tres días desde que decenas de maquiladoras en Matamoros, Tamaulipas, se levantaron en huelga. A la fecha, varias de estas empresas llegaron a un acuerdo con sus trabajadores, pero otros obreros insisten en que no cesaran hasta recibir un aumento salarial del 20 por ciento y el pago de un bono anual de 32 mil pesos.
El paro de labores comenzó el 25 de enero en 44 empresas de la zona, pero conforme han avanzado los días, muchas han desistido. Durante el fin de semana en cuatro lugares de trabajo se desconvocó la huelga y en otros tres los empresarios firmaron convenios para suspender la protesta.
Las autoridades laborales del estado han calificado de ilegal la protesta de los trabajadores debido a que consideran que no se presentó una declaración oficial de huelga, un aviso que de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo, los empleados deben dar con días de antelación.
En otras 13 empresas las autoridades estatales afirmaron no tener competencia al ser responsabilidad federal, por lo cual corresponde intervenir a la Secretaría de Trabajo federal.
Luisa Alcalde, secretaria del Trabajo y Previsión Social se lavó las manos y aclaró que el asunto es meramente estatal.
El conflicto laboral comenzó luego de que el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador decretó un aumento del 100 por ciento en el salario en toda la zona fronteriza del país, incluido Matamoros, pero los obreros detectaron que dicho incremento se “disfrazó” con la eliminación de prestaciones.
Las fábricas afectadas son principalmente extranjeras y tienen afiliados al Sindicato de Jornaleros y Obreros Industriales Maquiladora (SJOIIM), el cual representa a trabajadores de 45 maquiladoras.
Exigen no intervención
El sindicato de jornaleros exigió al Gobierno de Tamaulipas sacar las manos del conflicto y dejar de presionar a los trabajadores que exigen el 20 por ciento de aumento salarial y un bono de 32 mil pesos, el cual estipula el contrato colectivo de trabajo.
Las secretarías de Trabajo y Desarrollo Económico de Tamaulipas informaron que 13 de las empresas manufactureras descartaron recurrir al paro laboral y solicitaron que la Junta Federal del Trabajo resuelva sus demandas.
El titular de Desarrollo Económico, Carlos García González, explicó que las 28 empresas que suspendieron labores representan 15 mil puestos de trabajo en empresas relacionadas con la industria eléctrica, médica, metal mecánica, plástico y textil.
Además, dos empresas: Cepillos de Matamoros y Kearfott-OHD, fabricante de portones eléctricos, anunciaron su salida de esa ciudad fronteriza, por no cumplir las expectativas sindicales.