Constitución moral, ni catecismo ni mandamientos

El gobierno electo lanzó ayer la convocatoria para escribir la Constitución Moral, uno de los documentos que más ha despertado polémica entre seguidores y adversarios del próximo presidente, Andrés Manuel López Obrador.

El mandatario electo señaló que sin ella, su gobierno que traerá la Cuarta Transformación estaría coja, pues no se trata solo de buscar el bienestar material de México.

La redacción de esta Constitución Moral obedece a un intento por fortalecer los valores de la sociedad mexicana para mejorar no solo sus condiciones materiales, sino las morales, culturales y espirituales.

“Se piensa que no debemos meternos en estos asuntos, que no nos corresponden. Hay quienes piensan que tiene que ver con lo religioso, hay quienes piensan que tiene que ver con lo personal, que esto es una invasión a nuestra intimidad.

“Pero, como ha quedado de manifiesto desde hace mucho tiempo, desde los griegos, es muy importante la moral; la política es un imperativo ético y se tiene que pensar la necesidad del fortalecimiento de valores”, señaló el mandatario electo.

Esta Constitución será elaborada por un equipo conformado por Verónica Velasco, Jesús Ramírez Cuevas, Enrique Galván Ochoa y José Agustín Ortiz Pinchetti, quienes tomarán en cuenta las aportaciones que los ciudadanos.

¿Qué es la Constitución Moral?

Sus detractores consideran que se trata de un intento por imponer una moral pública, apegada al cristianismo. Sin embargo, ayer los encargados de redactar esta Constitución Moral negaron tal hecho.

“No es una Constitución jurídica; no es un intento por normar la vida privada; no es un pretexto para construir un modelo autoritario de gobierno; no se va obligar ni a imponer nada a nadie; no se pretende que alguna institución se vuelva garante de la moral; no es un catequismo; no son mandamientos ciudadanos”, explicó Verónica Velasco.

Velasco es directora de Contenidos y Producciones Originales de Argos, una productora fundada por Epigmenio Ibarra, productor cercano a AMLO.

Jesús Ramírez, vocero del gobierno electo y futuro coordinador de Comunicación de la Presidencia de la República, sostuvo que se trata de revivir algunos de los valores que se han perdido con el tiempo, como la solidaridad, la empatía y el valor de la palabra.

“El 1 de julio la gente decidió el cambio y ahora se trata de transformar nuestro país. A esa tarea hay que sumar nuestras mentes, nuestros corazones y nuestras manos para llevar ese cambio”, dijo Ramírez Cuevas para después agregar que esta Constitución será la piedra angular de la “Cuarta Transformación” del país

Por su parte, Enrique Galván Ochoa, analista económico propuso que ahora se recompense a los servidores públicos honestos y se entregue un premio de forma anual y José Agustín Ortiz Pinchetti, otro de los redactores de la Constitución Moral, se refirió a la propuesta del presidente electo de otorgar un perdón a los políticos corruptos.

“Si ahora quisiéramos perseguir a los corruptos, pues simplemente, como no podríamos dejar a unos y perseguir a otros, tendríamos que alquilar algunos de los estadios en toda la República y seguramente serían insuficientes”, expuso.

Estos cuatro personajes señalaron que esta Constitución marcará el inicio de una dinámica con nuevas reglas.

Como documento base de la Constitución Moral, sus creadores tomaron la Cartilla Moral, redactada por Alfonso Reyes en 1944, en la que se establecieron algunos principios éticos y morales para la sociedad mexicana.

El 31 de julio del 2019 habrá una convención en la que se aprobará el texto final de la Constitución Moral.