Las sesiones virtuales que por la pandemia de Covid-19 instalaron los diputados del Congreso local son apenas un avance del trabajo legislativo. Los dictámenes se están acumulando para su aprobación en el Pleno.
Legisladores de cinco Comisiones de Hacienda avalaron en línea un total de 61 cuentas públicas de municipios. Corresponden a los ejercicios fiscales de 2018, a los municipios metropolitanos y rurales, pero existen 42 pendientes más por revisar.
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Incluso, la Comisión de Educación, Cultura y Deporte aprobó una iniciativa caduca del diputado Juan Carlos Leal Segovia, referente a la Ley de Educación. El coordinador del partido Encuentro Social propuso que en las escuelas se cree conciencia sobre el respeto a la vida desde la concepción hasta la muerte natural.
De manera rápida, los legisladores podrían aprobar 250 pendientes con más de 32 millones de pesos no solventados, como ocurrió con la iniciativa de Leal Segovia.
Además, esta acumulación de expedientes de los diputados locales se suma a otras solicitudes de reformas constitucionales que no pasan en primera vuelta, como la del derecho a la ciudad que promovió la bancada de Movimiento Ciudadano y el derecho a la Movilidad, del Grupo Legislativo del PAN.
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Tampoco hay que olvidar la sanción contra el secretario de Gobierno, Manuel González, acusado de desvío de recursos para la campaña presidencial del gobernador Jaime Rodríguez Calderón, quien también tiene un castigo pendiente en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
También falta promulgar nuevas leyes, tales como la de Residuos, de Publicidad, de Prevención y Protección al Embarazo Adolescente y la Ley para Protección a Periodistas y Defensores de los Derechos Humanos y armonizar la reforma federal de paridad total con la constitución local y las leyes secundarias.
Periodo inactivo en el Congreso
Diputados de la Septuagésima Quinta Legislatura del Congreso serán recordados por la falta de actividad en el Segundo Periodo Ordinario de Sesiones.
Los legisladores han tenido sólo 30 días de trabajo durante estos primeros cuatro meses de 2020. En febrero se dieron el lujo de añadir un receso por el “puente” correspondiente al 5 de febrero, luego de tener semanas de descanso desde el 19 de diciembre.
Los diputados locales a diferencia de sus homólogos a nivel federal, quienes sí fueron convocados para acudir a San Lázaro, simplemente si se tomaron el fin de semana largo.
Los días de descanso se han acumulado por la pandemia del Covid-19, pues desde el 16 de marzo decidieron abandonar sus curules y regresaron el 2 de abril para aprobar el fondo de emergencia para el Gobierno del estado.
Esto a pesar de que fue hasta el 30 de marzo cuando el Gobierno federal ordenó la suspensión hasta el 30 de abril de actividades no esenciales en los sectores público, privado y social. Por el contrario, las esenciales son las que de manera directa son necesarias para atender la emergencia sanitaria y entre éstas están involucradas la legislación en los niveles federal y estatal. Los diputados no acuden al recinto legislativo pero salen a la calle sin respetar la indicación de quedarse en casa ante la emergencia nacional.
Han entregado donativos a médicos y despensas, como lo hizo el presidente del congreso, Juan Carlos Ruiz; el coordinador de la bancada de Morena, Ramiro González, y el coordinador de la bancada de Movimiento Ciudadano, Luis Donaldo Colosio Riojas.
