El Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) confirmó que será este sábado 20 de octubre cuando se lleve a cabo el Décimo Sexto Pleno Extraordinario del IX Consejo Nacional, una cita trascendental para el futuro del Sol Azteca.
Según los detalles que ha dado a conocer la dirigencia perredista, los consejeros nacionales están citados en las instalaciones de Expo Reforma en la Colonia Juárez en la ciudad de México a las 13 horas en primera convocatoria o a las 14 horas en segunda convocatoria.
Entre las propuestas que se han hecho públicas por parte de diversas corrientes y que se espera que sean abordadas durante la sesión del Consejo Nacional está un posible cambio de nombre del partido, o incluso la disolución del mismo. Por lo que el tema de la renovación de la dirigencia podría no ser el único importante que se trate en los próximos días.
Tras los resultados del pasado 1 de julio, en donde el PRD pasó a ser una fuerza política minoritaria a nivel nacional, y después de haber perdido el registro en algunos estados, las diversas ‘tribus’ perredistas llevaron a cabo de manera particular su análisis de la debacle electoral.
Posteriormente, la dirigencia nacional, encabezada por Manuel Granados recibió las propuestas de las diferentes corrientes, las cuáles se espera que sean discutidas durante el cónclave de este sábado.
Algunos liderazgos y expresiones se han pronunciado por cambiar no solo el nombre del partido, sino cambiar la plataforma política y los estatutos, pues consideran que el PRD ya cumplió un ciclo y debe refrescar sus propuesta política y adaptarla a los nuevos tiempos.
Sin embargo, algunas otras expresiones como Iniciativa Galileos tiene propuestas más drásticas. El grupo interno encabezado por el exdirigente nacional Guadalupe Acosta Naranjo se ha posicionado por una refundación radical del partido, formando un nuevo proyecto.
Esto es disolver al partido, y utilizar el registro del mismo para formar uno nuevo que parta de cero, una propuesta que no suena descabellada dado el ambiente que se vive al interior del Sol Azteca.
La situación es tan delicada que tampoco se descarta que alguna o algunas de las corrientes internas decidan ‘abandonar el barco’ para sumarse a Morena o incluso formar un nuevo partido de izquierda. Las interrogantes podrían empezar a resolverse este mismo fin de semana.