En el marco del internacional Día de la Remembranza Trans, el Centro de Apoyo a las Identidades Trans recordó con fotografías y veladoras a todas las compañeras trans que les han sido arrebatadas por la violencia en el país.
Con un collage de fotografías con los rostros de compañeras como Julia Zuñiga y Agnes Torres, las protestantes reclamaron a las afueras de la Fiscalía General de la República (FGR) que no haya justicia para ninguna de sus amigas asesinadas e invisibilizadas.
Natalia Lane, coordinadora del Centro, dijo que hoy y siempre se debe de recordar a todas las mujeres trans que faltan.
“Recordar a las asesinadas es nuestra forma de combatir y denunciar la transfobia, el prejuicio y la discriminación que nos atraviesa. Hoy estamos aquí por la rabia, el coraje y la memoria”, sentenció.
De acuerdo con Lane, México es el segundo país a nivel mundial con la mayor cantidad de transfeminicidios.
Al coro de Aquí está la resistencia trans, las y los compañeros de la comunidad LGBTTTI sostuvieron que su derecho de ejercer a la identidad no tiene que significar una sentencia de muerte ni ser personas de persecución.
Los asesinatos a mujeres trans también son feminicidios es la leyenda que se plasmó en más de una de las cartulinas que fueron colocadas en la pared principal de la Fiscalía.
“Tenemos derecho a que nos respeten, a que se reconozca nuestra trayectoria de vida y a celebrar las identidades porque las personas trans existimos, porque las infancias trans resisten”, señaló Lane.
Por su parte, al leer la semblanza de una de las mujeres asesinadas, Daniela Espinoza lamentó que cada año la comunidad deba exigir justicia por una asesinada más.
“La violencia no para y lo sabemos pero a pesar de ello estamos juntas y haciéndonos presentes para decirle al mundo que aquí estamos, que entre nosotres creamos lazos”, comentó Espinoza.
Por último, tomadas de la mano y con la bandera de color rosa, azul y blanco, las mujeres prometieron a las autoridades que no las verán vencidas y que no descansarán hasta que se les deje vivir en paz.
