La brigada Marabunta desmintió a la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México luego de señalar que el equipo de mujeres policías del Grupo Atenea no utilizó gases en la marcha de ayer.
El viernes, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) capitalina informó que las mujeres policías solo portaban “el equipo de protección personal, que no incluye gases”, durante la manifestación convocada ayer por el feminicidio de Ingrid Escamilla.
Además, indicó que no hubo personal de la dependencia infiltrado en la marcha.
Sin embargo, la brigada Marabunta desmintió las declaraciones de las autoridades capitalinas.
A través de Twitter, la brigada manifestó que personal de la SSC de la CDMX utilizó indebidamente extintores de polvo químico seco sobre las manifestantes.
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“Fuimos testigos del uso indebido de extintores de polvo químico seco sobre las manifestantes, la presidenta y personal de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHDF) también fueron rociados y 2 integrantes de marabunta fueron directamente atacados con gas pimienta”, expresaron.
“No respetaron protocolo, tomaron fotos con sus dispositivos personales, golpearon a varias manifestantes, encapsularon a los contingentes y hubo participación de elementos hombres”, denunciaron.
Marabunta desmiente estas declaraciones, fuimos testigos del uso indebido de extintores de polvo químico seco sobre las manifestantes, la presidenta y personal de la @CDHDF también fueron roceados y 2 integrantes de marabunta fueron directamente atacados con gas pimienta
— Brigada Marabunta (@BrigadaMarabunt) February 15, 2020
También señalaron que “elementos de esta secretaría protegían a dos mujeres vestidas de civil y encapuchadas que agredían a las manifestantes”.
Incluso, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, Nashieli Ramírez indicó que hubo “un exceso del uso del extintor”.
De acuerdo con algunos videos que circulan en redes sociales, la policía capitalina disparó extintores directamente a las manifestantes, de los que salía un humo verde que provocaba ardor en ojos, garganta y ataques de tos.