Por el caso de una mujer que fue víctima de negligencia médica en una clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Cuautitlán Izcalli, Estado de México, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió dos recomendaciones a este organismo, luego de que trató a una mujer con diclofenaco y causara su muerte.
En un comunicado, el instituto informó que una mujer de 61 años acudió 18 de noviembre de 2016 a la Unidad de Medicina Familiar 52 para atenderse un dolor de cabeza intenso, irritabilidad y dolor de rodillas.
Un médico de esta clínica registró su peso, talla y temperatura, le pidió que se realizara una radiografía de la rodilla y le recetó diclofenaco.
Un día después de la visita al médico, la mujer tuvo que ser trasladada a urgencias del Hospital General 57 tras haber sufrido convulsiones y un desmayo.
Para el 6 de diciembre de ese mismo año, la paciente ya había perdido la vida debido a un derrame cerebral.
Luego de una revisión a su expediente –explica este comunicado– se hallaron distintas irregularidades como la falta de exploración física, resumen clínico, diagnóstico y tratamiento adecuado, además de que la hipertensión arterial sistémica que sufría la mujer, fue ignorada.
Por ello, la CNDH solicitó al IMSS que repare integralmente el daño ocasionado a los familiares de la víctima y les proporcione atención psicológica y tanatológica.
