La intercepción reciente de un submarino con más de una tonelada de clorhidrato de cocaína en aguas colombianas que pertenecería al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) no es la primera ni única señal de que este grupo delictivo ha aprendido a dominar la vía acuática y el Lago de Chapala para expandir sus actividades criminales.
Un dictamen elaborado por la Secretaría de Seguridad del Gobierno de Jalisco el 5 de agosto de 2019, ya en la actual gestión del mandatario Enrique Alfaro Ramírez, confirma que las autoridades tienen conocimiento de que el Lago de Chapala es explotado por el crimen organizado local para traficar narcóticos sobre sus aguas.
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Al referirse a las labores del grupo táctico llamado Escuadrón Anfibio, que está a cargo de la vigilancia del Lago de Chapala, la Secretaría de Seguridad de Jalisco señaló vía transparencia en el recurso de revisión 1046-2019:
“El lugar en donde estos (agentes) realizan sus funciones estratégicas en materia de seguridad obedece a una zona limítrofe con otra entidad federativa de alta incidencia delictiva (Michoacán), lo que los hace más vulnerables a ser víctimas de grupos delictivos que pudieran operar en la zona en donde se tiene indicios del traslado de enervantes o narcóticos por medio de vehículos acuáticos, lo que se ve favorecido con las características geográficas en donde los elementos operativos desempeñan sus funciones”.
A continuación, la Secretaría de Seguridad estatal, que en ese momento era encabezada por el general Daniel Velasco Ramírez, reconoce que la gran extensión del Lago de Chapala (más de 114 mil hectáreas) y su ubicación entre las entidades de Jalisco y Michoacán favorecen su uso para el tráfico acuático de drogas:
“La región de Chapala, por su situación y ubicación geográfica pudiera presentar condiciones idóneas para que grupos de la delincuencia organizada provenientes de otras entidades, así como de Jalisco, se les facilite el traslado de enervantes y hasta incluso armas de fuego por el lugar, mediante el uso de vehículos acuáticos”.
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Esto, señala: “Debido a la facilidad que presenta ese lago, pues al tener una gran extensión que representa más de siete veces la extensión territorial del municipio de Guadalajara, Jalisco, en donde es obvio que se tiene una mayor presencia policial de los cuerpos de seguridad vía terrestre, situación que es lógico que favorezca a dichos grupos criminales para facilitar sus operaciones de trasiego de drogas en la zona, vía acuática“.
Estos señalamientos de la Secretaría están contenidos en el dictamen de clasificación que elaboró en el recurso citado, y con el cual catalogó como información reservada y confidencial distintos datos acerca del Escuadrón Anfibio, tales como su estado de fuerza total y la cantidad de agentes que aprobaron y reprobaron el control de confianza.
El ‘narco-lago de Chapala’
La presunción de que el Lago de Chapala, en una región dominada por el CJNG, está siendo utilizado para traficar enervantes por vía acuática para eludir la vigilancia de las autoridades, la tiene el Gobierno de Jalisco desde que era encabezado por el exmandatario Aristóteles Sandoval Díaz.
De hecho, fue durante la gestión de Eduardo Almaguer Ramírez al frente de la Fiscalía General del estado que se creó y puso en operación el Escuadrón Anfibio, en marzo de 2017.
La actual Secretaría de Seguridad del gobierno alfarista señala que la “finalidad principal” del Escuadrón Anfibio “es la de brindar seguridad a los habitantes, atendiendo principalmente la comisión de delitos de alto impacto, de los cuales se presume que son llevados a cabo en su gran mayoría por grupos criminales que pudieran operar en la zona con el trasiego de diversas drogas (…); es por lo que la entrada en funciones del citado grupo, obedeció a implementar labores estratégicas encaminadas a la intercepción, búsqueda, localización y captura de traficantes de objetos y drogas en aguas de dicho lago”.
Este Escuadrón Anfibio que, tras la disolución de la Fiscalía General, quedó ubicado como un grupo táctico especializado de la Secretaría de Seguridad, ya fue infiltrado por la delincuencia, pues el 18 de febrero de 2019 se confirmó la aprehensión de siete de sus miembros por el fiscal Gerardo Octavio Solís Gómez:
“En una revisión de rutina de manera no informada, sino que se llegó al lugar por parte de otra área de la misma Secretaría con la finalidad de hacer una revisión, se les encontraron diversas cantidades de marihuana, y en otros casos de polvo blanco, una báscula gramera y un arma de la que no demostraron que estuviera amparada por la licencia colectiva; se vinieron con el servicio siete elementos detenidos”.
Desde la anterior gestión de Aristóteles Sandoval Díaz se tiene la presunción de que el CJNG utiliza el Lago de Chapala para el tráfico de enervantes
El submarino del CJNG
El 25 de agosto de 2020, la Policía Nacional de Colombia informó que había concretado con éxito “una operación de interdicción marítima que permitió la interceptación de un semisumergible a 46 millas náuticas de Tumaco (Nariño)”.
Según las autoridades colombianas, la embarcación transportaba más de una tonelada de clorhidrato de cocaína (mil 055 kilos), que podría alcanzar un valor estimado de 18.6 millones de dólares en México.
La información difundida por la Policía Nacional de Colombia establece el vínculo del submarino con el CJNG: “Los trabajos de inteligencia e investigación criminal de la Policía Nacional, en el marco de la ‘Operación Tritón’, indican que el cargamento pertenecería al Grupo Armado Organizado Residual (GAOR) E-30 y que el objetivo era dejarlo en manos del Cártel Jalisco Nueva Generación”.
Y aúna: “Este semisumergible, que tendría un costo aproximado de 1.2 millones de dólares, tiene una capacidad de carga de hasta tres toneladas y cuenta con un sistema de navegación satelital que, según las investigaciones, le iba a permitir llegar a su destino en Costa Careyes, estado mexicano de Jalisco, en la primera semana de septiembre”.
La tripulación del vehículo marítimo quedó detenida, pues se informó que: “Durante la ‘Operación Tritón’ fueron capturados los tres tripulantes del semisumergible, los cuales quedarán a disposición de la Fiscalía General de la Nación”.
