La extradición de Mauricio Toledo fue autorizada por la Corte Suprema de la República de Chile para que el exdelegado y exlegislador enfrente los cargos por posibles actos de corrupción de los que se le acusa en México. Para lo que se tomarán medidas hasta que pueda ser entregado a las autoridades mexicanas.
Este viernes 24 de diciembre, el ministro Mauricio Silva Cancino notificó del fallo por el cual el Supremo chileno concedió la extradición de Toledo que fue solicitada por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México por su presunta participación en actos de enriquecimiento ilícito durante su periodo como delegado de Coyoacán (2012-2015).
Con este fallo, la Corte Suprema también ordenó medidas cautelares para Toledo hasta que sea entregado a las autoridades mexicanas en una fecha aún por definir. Así como se ordenó notificar a la oficina que la Interpol mantiene en la Policía de Investigaciones chilena, pues la FGJ también solicitó ficha roja en su contra desde agosto pasado.
El pasado 16 de diciembre, la FGJ informó de su participación en la audiencia de Toledo. Proporcionando a la justicia chilena las pruebas de los supuestos actos de corrupción cometidos por su administración delegacional, mismos que le costaron la diputación federal que logró mantener desde 2018 como integrante de dos partidos políticos distintos.
La Cámara de Diputados autorizó en agosto el desafuero de Toledo, quien llegó como diputado plurinominal del Partido de la Revolución Democrática en 2018. Siendo que, en septiembre, podría haber vuelto a ocupar el cargo tras ser reelecto en los comicios de este año, esta vez postulado por el Partido del Trabajo, al que se integró desde finales de 2020.
Toledo libró la orden de detención en su contra pues, como él mismo lo confirmó, escapó del país desde finales de julio, cuando la FGJ solicitó su desafuero. Esto al considerarse víctima de una “campaña de desprestigio” ordenada por la administración capitalina de Claudia Sheinbaum y ejecutada por la fiscal general Ernestina Godoy.
Originalmente, Toledo aseguró haber salido del país para “atender asuntos familiares” en Chile, de donde son originarios sus padres, quienes llegaron a México huyendo de la dictadura de Augusto Pinochet. Razón por la cual el exdiputado cuenta con doble nacionalidad, lo que intentó aprovechar para enfrentar su proceso judicial a distancia.