En México se practican el triple de cesáreas de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), si se considera que 45 de cada 100 nacimientos son por esta vía quirúrgica, según reportó el New York Times.
Se trata de un procedimiento que aumenta las probabilidades de padecer hemorragia, de presentar infecciones, de extirpación de la matriz y de lesiones a otros órganos, especialmente en mujeres cuyo perfil es el de aquellas con mayores recursos económicos, las que acuden a hospitales privados, las que cuentan con niveles de educación más altos, las mamás primerizas y las que tienen 35 años de edad o más.
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En teoría, la cesárea es una operación que debería ser concebida como un último recurso para aliviar condiciones maternas o fetales o cuando existe un riesgo evidente para la madre, el feto o ambos durante el parto.
De ser una técnica de excepción, se ha convertido en procedimiento rutinario, lo que ha provocado el alza de las tasas de cesáreas, según el estudio “Cesáreas en México: aspectos sociales, económicos y epidemiológicos” realizado por investigadores de la Universidad de Guadalajara.
En dicho estudio se establece que “es claro que el promedio de costos para el cuidado de las madres sometidas a un parto vaginal es menor que los costos para el cuidado de las madres sometidas a cesárea”.
Día Internacional del Obstetra
Instituciones y organismos del país felicitaron a los obstetras en su día y destacaron la importancia de la labor de estos especialistas en el cuidado del embarazo.
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“El deber del equipo médico y del obstetra es brindarle a la mujer toda la información pertinente, por supuesto libre de tecnicismos, para que ella pueda hacer una ponderación adecuada y elegir la vía de nacimiento del feto, lo que implica un ejercicio por parte del médico no solo de humildad al considerar como su igual a la paciente”, refiere el artículo “Operación cesárea. Una visión histórica, epidemiológica y ética para disminuir su incidencia” publicado por la Revista Médica del IMSS en 2015.
Explican que muchas veces es el temor a una demanda hacia el médico por parte de la paciente lo que obliga a intentar justificar la cesárea, pero paradójicamente la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (CONAMED) reporta que 46.3% de las quejas a ginecoobstetras son relacionadas a operación cesárea.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Perinatología, la obstetricia –del latín “ob stare” que significa saber esperar- es la especialidad médica que se ocupa del embarazo, del nacimiento del bebé y del puerperio (la salud de la mujer en los 40 días posteriores al parto).
Estos especialistas atienden padecimientos como la preclamsia, que es la hipertensión arterial y proteinuria (proteínas en la orina) y los mismos síntomas en la eclamsia, pero con convulsiones en una mujer embarazada, porque ello puede poner en riesgo su vida.
