‘Nos quedamos esperando’
Transportistas que negocian el aumento al pasaje de combis y “peseras” se quedaron esperando el anuncio en la Gaceta Oficial que la Secretaría de Movilidad capitalina (Semovi) había prometido se concretaría ayer miércoles.
En plena época electoral, el Gobierno de la ciudad enfrenta el amago de paro y manifestaciones por parte de transportistas que no están dispuestos a posponer el incremento de la tarifa, de 4 a 7 pesos, como lo proponen desde hace un año, para hacer frente al incremento de la gasolina y las refacciones.
Icela Lagunas
Transportistas que negocian el aumento al pasaje de combis y “peseras” se quedaron esperando el anuncio en la Gaceta Oficial que la Secretaría de Movilidad capitalina (Semovi) había prometido se concretaría ayer miércoles.
En plena época electoral, el Gobierno de la ciudad enfrenta el amago de paro y manifestaciones por parte de transportistas que no están dispuestos a posponer el incremento de la tarifa, de 4 a 7 pesos, como lo proponen desde hace un año, para hacer frente al incremento de la gasolina y las refacciones.
Los Transportistas Unidos de la Ciudad de México, en voz de Nicolás Vázquez, explicaron su desconcierto, pues aseguran que había un acuerdo con Héctor Serrano, secretario de Movilidad, para hacer oficial el aumento.
“Nos quedamos esperando para saber de cuánto será el incremento”, dijo Vázquez.
El Gobierno de la Ciudad de México, específicamente la Secretaría de Finanzas, evalúa de dónde tomar 600 millones de pesos del erario público para subsidiar durante el 2017 el transporte público y evitar que el aumento recaiga en la ciudadanía.
“También se planteó para nosotros una serie de condonaciones fiscales como multas, revistas que pudieran dejarse de cobrar, sin embargo, eso representa un dos por ciento, no impacta de manera directa”.
La tarifa actual es de 4 pesos para los primeros 5 kilómetros en microbús; 5 pesos para más de 5 kilómetros, y 5.50 para 12 o más kilómetros de recorrido.
El dirigente explicó que desde el 2016 entregaron a las autoridades de la Semovi un estudio desglosado en el que se justifica claramente la necesidad de un aumento a la tarifa, que desde abril de 2013 está congelada.
Desde el año pasado, explica, se solicitó el incremento de 3 pesos a fin de contar con una tarifa mínima de 7 pesos en micros, vagonetas y las llamadas “peseras”.
“Se analizó un subsidio para no impactar al público en general. Hablé por teléfono con el director del Transporte de Semovi, Moisés Israel, que nos comentó que habían tenido un retraso y que nos reuniríamos mañana, entiendo que la demora obedece a la Consejería Jurídica y la Secretaría de Finanzas, a quienes le corresponde analizar los impactos y de dónde se tomarán los recursos con los que pretenden subsidiar”, explicó en entrevista.
Nicolás Vázquez detalló que en un periodo de 20 años el gremio de transportistas ha obtenido cuatro aumentos, y en 2016 se envió un documento en el que se justifica la petición a partir del incremento a los insumos, refacciones, mantenimiento y gasolina.
En latente paro
De acuerdo con los prestadores de servicio, poco más de 4 millones y medio de personas se mueven en el transporte público que no forma parte del Sistema de Transporte Colectivo Metro.
A diario, según estimaciones, se realizan alrededor de once millones de pasajes tan sólo en microbuses, vagonetas y corredores.
Desde principio de año el gremio arreció su petición de incremento con la amenaza de suspender el servicio en puntos clave de la capital de la República.
El martes de esta semana se tenía previsto una primera movilización, no obstante las autoridades les prometieron que el miércoles 19 de abril saldría publicado el aumento en la Gaceta Oficial, situación que no ocurrió.
Después del “plantón” sufrido, representantes de diferentes organizaciones se reunieron la tarde de ayer en las instalaciones de Grupo Metropolitano de Transporte para evaluar cuál sería el paso a seguir en caso de que las autoridades prolonguen la publicación del aumento a la tarifa.
Impacto al mínimo
La Secretaría de Movilidad dio a conocer esta semana que después de 90 mesas de trabajo con representantes del gremio transportista estaban muy cerca de llegar a un acuerdo en el tema de incremento.
Puntualizó que no habría aumento en la tarifa del metrobús, RTP ni Metro, así como tampoco al banderazo de arranque de los taxis.
En el comunicado la dependencia deja claro que el incremento solo se dará para garantizar el abasto del transporte en la Ciudad de México y no para aumentar las utilidades de los concesionarios.
La postura del gobierno capitalino al respecto ha sido clara, por un lado, se dice consciente de las repercusiones que tiene el alza a los hidrocarburos que se dispararon este año, pero también busca que el incremento impacte lo menos posible los bolsillos de los usuarios.
Cabe mencionar que en el año 2013 el Gobierno de la capital autorizó el aumento en la tarifa del Metro al pasar de 3 a 5 pesos, lo que ocasionó el descontento entre la población, que provocó, a su vez, uno de los ataques más fuertes de rechazo a la administración de Miguel Ángel Mancera Espinosa.
Para evitar que el aumento al transporte público como microbuses y “peseras” provoque un efecto adverso al mandatario local, el gobierno analiza el subsidio durante este año para evitar que los capitalinos resientan en sus bolsillos.
En análisis
Autoridades y prestadores del servicio de transporte están en negociación:
>> 3
Pesos de aumento pide el gremio de transportistas
>> 7
Pesos sería la nueva tarifa, de cumplir su petición
>> 600
Millones de pesos necesitaría el Gobierno local para subsidiar el aumento
>> 90
Mesas de trabajo reporta Semovi haber realizado con el gremio