En México, los elementos de policía trabajan en condiciones cada vez más precarias, mientras la violencia extrema se arraiga en el país, concluye un informe de la organización Causa en Común.
Desde diciembre de 2018 hasta abril de 2022, un total de mil 853 policías o expolicías han sido asesinados por criminales, un promedio de más de un elemento por día. La mayoría eran municipales (810), seguidos por estatales (629) y, por último, federales (98).
De acuerdo con los datos, obtenidos a través de notas periodísticas, los estados que concentran la mayor cantidad de asesinatos son Guanajuato, con el 15 por ciento; Estado de México, con el 8 por ciento; y Chihuahua, Michoacán y Veracruz, con el 7 por ciento cada uno.
El informe de la organización señala que otros estados que también destacan por el alto número de agentes asesinados son Guerrero, Zacatecas, Jalisco y Baja California.
Éste no es el único riesgo al que se enfrentan los policías. De acuerdo con la investigación, trabajan turnos de más de 24 horas, carecen de sueldos y prestaciones adecuadas y no cuentan con capacitación suficiente.
“En algunos casos, deben soportar tratos denigrantes y de violencia al interior de sus corporaciones. Aunado a esto, también enfrentan discriminación y falta de respeto por parte de la ciudadanía”
Estrés y bajos salarios a las corporaciones de policía
En los últimos tres años, los recursos destinados a las corporaciones de policía se han visto drásticamente disminuidos o eliminados.
En cambio, señala el informe, la mayoría de los delitos de alto impacto continúan a la alza o se mantienen en niveles extremadamente altos; y además se incrementan las partidas presupuestales asignadas a las fuerzas armadas.
Además, si bien el trabajo policial implica un riesgo, éste se magnifica cuando se trabaja en condiciones de estrés extremo y con jornadas extenuantes.
“Los padecimientos más recurrentes son aumento o disminución de peso, irritabilidad, insomnio, ansiedad, nerviosismo y fatiga crónica; es decir, ‘el síndrome de burnout’. En casos extremos, la tensión llega a generar problemas psicológicos, emocionales o trastornos psiquiátricos severos y, consecuentemente, ausentismo, adicciones, incapacidades y muertes por accidentes o suicidio”, se lee.
El informe menciona que desde diciembre de 2018 a abril de 2022, se han registrado 129 paros, 51 emplazamientos a paro y 73 manifestaciones de policías en casi todos los estados del país para exigir mejoras en sus condiciones de trabajo.
