La Fiscalía General de la República (FGR) realizó el primer cateo en el Motel Nueva Castilla, ubicado en el municipio de Escobedo, desde que tomó el caso de la muerte de la joven Debanhi Escobar, hace casi tres meses.
Los trabajos de inspección se concentrarían en una primera instancia de manera general, recorriendo todas las instalaciones y después se enfocarían en la cisterna donde la víctima fue hallada sin vida 21 días después de reportarse su desaparición.
Ayer cerca de las 17:00 horas llegó un convoy integrado por peritos y personal de la FGR, quienes prolongaron los trabajos hasta la madrugada de este viernes. De momento las autoridades federales no han informado sobre lo encontrado al interior del motel.
Las investigaciones se mantienen con hermetismo, debido a que ningún funcionario ha emitido alguna información sobre las acciones que realizan los peritos y personal de la fiscalía, solo se ha observado a personal de criminalística entrar y salir del lugar.
Anoche, debido a que el sitio no cuenta con planta de luz, los elementos trabajaron durante la madrugada con algunas lámparas, por lo cual, ha trascendido que esa limitante extendió las horas de labores en el motel.
El señor Mario Escobar informó que no acompañará a los funcionarios federales y dejará que hagan su trabajo, pues fue él mismo quien solicitó al Gobierno federal su intervención para esclarecer el caso.
Mantiene Fiscalía de Nuevo León presencia en el caso
La Fiscalía General de Justicia de Nuevo León cuenta con una investigación en curso sobre el caso de Debanhi Escobar, a pesar de la intervención de las autoridades federales.
El organismo cuenta con una carpeta de investigación en contra de dos ex empleadas del motel por el presunto delito de falsedad en declaraciones y encubrimiento, la cual lleva tres audiencias diferidas.
De acuerdo con las indagatorias, la autoridad encontró ocho teléfonos celulares al interior de una casa de una de las ex empleadas tras llevar a cabo un cateo.