De acuerdo con la Fiscalía de Michoacán, el grupo criminal que irrumpió a un palenque en el municipio de Zinapécuaro y que asesinó a 20 personas ingresó con un camión repartidor de frituras lo que les sirvió como un “caballo de Troya”.
A través de un comunicado, la FGE precisó que los trabajos de investigación realizados hasta el momento indican que aproximadamente a las 15:00 horas abrió sus puertas el palenque ubicado en el rancho El Paraíso, de la Colonia Emiliano Zapata.
Ahí, presuntamente se encontraban integrantes de una célula delincuencial que opera en la región Oriente de Michoacán, lo que habría sido motivo para la masacre posterior.
Señaló que una vez que había concluido la actividad, hasta las inmediaciones del palenque arribó una camioneta de una empresa de frituras, de la que descendieron varias personas armadas y que vestían ropas de camuflaje.
Agregó que simultáneamente, el grupo armado utilizó un camión de pasajeros que circulaba al exterior el inmueble para realizar un bloqueo.
La Fiscalía indicó que una vez que ingresaron al recinto, los hombres armados accionaron armas de fuego en contra de los asistentes.
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Entre ellos, expuso, el propietario del recinto, Abiel “A”, de 59 años, y su hijo Salvador “A”, quienes murieron en el lugar, al igual que otras 17 personas.
La dependencia reiteró que en esa agresión resultaron lesionadas cinco personas, una de las cuales murió en el trayecto a un hospital.
Tras el ataque, los responsables huyeron en diferentes vehículos y dejaron abandonado el vehículo, el cual había sido robado con violencia el pasado 24 de marzo, a la altura de la comunidad El Salitre Labrador, en el Estado de México.
Finalmente, la Fiscalía mencionó que durante la inspección practicada en el lugar, ubicó 15 vehículos de diferentes tipos y modelos; de igual manera, afirmó que en uno de esos vehículos, presuntamente relacionado con las personas que sufrieron la agresión, localizó indumentaria y calcomanías con el logotipo de una célula criminal.
