En 2010 Wikileaks publicó alrededor de 250 mil cables diplomáticos clasificados del gobierno de Estados Unidos.
En uno de ellos, el entonces embajador estadounidense en México Carlos Pascual reportó al Departamento de Estado, con copia a otras dependencias del gobierno estadounidense, como al Comando del Sur y también al Comando Norte, el desahogo de la reunión que sostuvo el presidente Calderón con el entonces Director Nacional de Inteligencia, Dennis Blair en octubre de 2009.
El cable con referencia 09MEXICO3061 hace un sumario de los temas abordados en una reunión de 40 minutos entre ambos personajes.
Destacando que el presidente de México consideraba que era “muy triste” y “un gran error”, el hecho de que la falta de capacidad de coordinación y respuesta de las fuerzas federales culminara muchas veces en operativos fallidos.
Es decir, que una vez que se obtenía inteligencia sólida sobre la ubicación de actividad delictiva, la Policía Federal no actuaba efectivamente.
El cable asegura que una de las razones que tanto Calderón como Blair encontraron, era que la mayoría de la capacidad operativa de la policía se encuentra en la ciudad de México.
Reconociendo que la Sedena, siendo más descentralizada, era capaz de operar en áreas remotas y de difícil acceso de manera más efectiva.
Sin embargo, el documento enfatizó que hasta esa fecha la Sedena y la PF no habían podido definir una plataforma para la cooperación operativa entre ambas instancias.
Hecho que evidencia lo que diversos medios de comunicación, funcionarios públicos y analistas han asegurado.
Una de las grandes fallas en la estrategia de seguridad calderonista fue la falta de atención a un pequeño gran elemento, que es la coordinación y cooperación entre las dependencias de seguridad.
Sobre todo entre la Policía Federal y el sector militar, ya sea el Ejército o Marina. Y es que es bien sabido que el presupuesto de la Policía Federal ha recibido durante el sexenio de Felipe Calderón ha sido el más grande de la historia.
Con capital en la bolsa, la secretaria de Seguridad Pública se hizo de una infraestructura altamente sofisticada para tareas de inteligencia y vigilancia, desbancando a otras instancias
El comunicado clasificado atestigua la recomendación de la dirección de inteligencia norteamericana de no enfocarse únicamente en decapitar a los cárteles de la droga.
Es decir, Dennis Blair enfatizó que la estrategia tendría que ir más allá de capturar a los “objetivos de alto valor” (HVT por sus siglas en inglés).
El controvertido ex almirante hizo mención de una frase que ha sido utilizada por múltiples expertos en seguridad y narcotráfico; “Si le cortas la cabeza a esta serpiente, le crecerán nuevas cabezas”.
A lo que Calderón replicó; “Lo ha dicho perfectamente claro, si no atacamos el cuerpo, no podremos vencerlos”.
Sin embargo de 2009 a la fecha han sido capturado diversos altos mandos, cuyo resultado ha culminado en el aumento de la violencia.
